Las pequeñas comercializadoras alcanzan el 6% del mercado eléctrico
Estas empresas empiezan a captar clientes de las compañías tradicionales
Las comercializadoras independientes de electricidad, es decir, las empresas que no pertenecen a un grupo integrado verticalmente (Endesa, Iberdrola, Naturgy ( hasta hace poco Gas Natural), EDP y Viesgo (ahora de Repsol), daban servicio a más de 1,7 millones de puntos de suministro al cierre del primer trimestre de este año.
Empresas como Fenie, Holaluz, Podo, Enara Energía, Gesternova, Audax, Aldro, Watium o Factor Energía están “robando” poco a poco clientes que buscan mejores precios y también una mayor claridad en su factura.
En realidad, existen más de 300 comercializadoras repartidas por todo el territorio nacional, pero muchas de ellas son piratas. Algunas como la valenciana Alcanzia atraviesa momentos complicados financieramente y está en venta.
Las nueve citadas anteriormente son las líderes de ese segmento de independientes y las que de verdad están lanzando campañas agresivas para captar clientes. Algunas, como Factor Energía, llevan desde 1999 en el mercado, mientras que Podo, por ejemplo, ofrece contratar la luz desde finales del 2016 y desde marzo de este año ofrece el combinado de luz y gas gracias a un acuerdo con Galp.
En realidad, la liberalización de la baja tensión empezó el 1 de enero del año 2003. Desde entonces hasta el primer trimestre de este año, la cuota de las comercializadoras independientes ha pasado del 3,36% del mercado eléctrico al 5,87% en tres años. Estas empresas sólo pueden ofrecer servicios en el mercado libre y no en el regulado, salvo que pidiesen una licencia específica. Ninguna lo ha hecho.
Según los datos de la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, “en la actualidad hay más de 26 millones de consumidores domésticos con una potencia contratada inferior a 10 kilovatios, más de 11 millones de clientes acogidas al precio voluntario del pequeño consumidor ( PVPC) y más de 15 millones de pequeños clientes acogidos al mercado libre”. Es decir, la guerra se libra en el mercado liberalizado, donde cada compañía negocia con el cliente el precio ofrecido. Cada vez hay más ofertas cruzadas si se contrata luz y gas y sus respectivos mantenimientos. Además, la llegada de Repsol al sector eléctrico va a ser un revulsivo porque Viesgo tenía propuestas anticuadas y la petrolera tiene intención de incluir en el juego de ofertas los descuentos las gasolinas.
Hasta el 2003, Gas Natural estaba en el segmento de pequeñas comercializadoras, pero con la compra de Unión Fenosa saltó al de las grandes.
Las llamadas comercializadoras independientes van haciendo poco a poco sus pinitos, pero ya empiezan a preocupar, en cierta manera, a las grandes del sector. En el último trimestre, “más de 100.000 puntos de suministro han pasado a las comercializadoras independientes, lo que supone que uno de cada cinco que solicitan cambio lo hacen con estas comercializadoras”, señalan fuentes del sector.
El real decreto que aprobó el Gobierno sobre el sector eléctrico, hace unas semanas, persigue, además de medidas concretas para rebajar la factura eléctrica, dar claridad a este mercado. El objetivo del Ejecutivo de Pedro Sánchez es “hacer una limpia” e introducir mayor transparencia en este sector, puesto que algunas comercializadoras no compran electricidad para suministrar a sus clientes en el mercado diario, ni en el intradiario, sino que hipotéticamente esperan a la liquidación de REE, ya que toda la energía tiene la consideración de desvío. Aunque se trata de un aspecto técnico, el objetivo de la nueva normativa es evitar “la presencia de especuladores en este mercado”.
Estas empresas, mucho más especializadas, ya ofrecen a sus clientes determinadas medidas para proteger a los consumidores, como recoge la nueva normativa. Por ejemplo, Factor Energía lleva años haciendo a sus clientes un análisis exhaustivo de sus necesidades de
En total, 1,7 millones de clientes se han pasado en el mercado libre a empresas independientes
potencia contratada. Holaluz es la primera compañía que ofrece tarifa plana desde hace unas semanas. Y Podo, creada por Joaquín Coronado y Eugenio Galdón (excreadores de ONO), orienta proactivamente a sus clientes de cómo ahorrar en su factura de la luz advirtiéndoles si tienen contratada la potencia adecuada en función de sus niveles de consumo. Además, el cliente antes de contratar a estas empresa tiene una aproximación de lo que va a pagar y el ahorro respecto a sus proveedores anteriores. La mayor parte de ellas ofrecen energía 100% renovable, lo que gusta a muchos clientes para contribuir en la medida de lo posible a cumplir con el cambio climático.
Para Jorge Capilla, director general de Podo, “el salto que están dando estas comercializadoras independientes no es algo marginal e indica que este mercado en España empieza a parecerse al de otros países europeos, donde las comercializadoras independientes se han desarrollado de forma más intensa, como en el Reino Unido, donde 1 de cada 3 clientes que cambia lo hace a una compañía de este segmento”. En opinión de Emili Rousaud, presidente de Factor Energía, la líder de este segmento, “la diferencia está en los servicios que ofrecemos y en el precio de la energía vendida, que es mucho más competitivo”.