LAS CLAVES
1
EL INTERÉS POR LA CIENCIA. Desde joven Dalí se interesa por los avances científicos. En la exposición se muestra una foto de Dalí, de 1927, con el equipo de la revista L’Amic de les Arts, de Sitges, donde él lleva bajo el brazo la publicación Science and Invention. A finales de los cuarenta, su interés se centra en la física nuclear y pronto empezará a combinar elementos religiosos con cuestiones relacionadas con la fisión y la fusión nuclear.
2
GALA. Desde 1929 se convierte en amante, esposa, musa, administradora y algo más. El artista no sólo firma muchas obras anteponiendo el nombre de Gala sino que es su modelo. En la exposición se ve además como trabaja a partir de fotos que hace de Gala, que lleva casi milimétricamente a la tela.
3
METODOLOGÍA. Dalí utiliza fotografías e incluso papel de calco para dibujar siluetas. Dalí trabajaba con varios dibujos preparatorios la posición del cuerpo de Gala y su rostro. Y antes de dar por acabada la obra pintó dos óleos, Triple aparición del rostro de Gala (también expuesto) y otra Leda que permite seguir su trabajo. Leda atómica se expuso por primera vez en 1947 pero no la dio por concluida hasta 1949.
4
RETORNO AL CLASICISMO. Aunque Dalí nunca renegó del surrealismo ni abandonó del todo su método paranoico-crítico, lo cierto es que antes ya de su regreso a Europa en 1948 proclamó su retorno a los clásicos y a los grandes maestros. De ahí también su interés por las proporciones áureas.