La Vanguardia

‘Tiempos modernos’, 2018

- Quim Monzó

Crazy es una empresa japonesa que se dedica a cuestiones relacionad­as con los diversos montajes que implican las bodas. A principios de semana, la revista Bloomberg dio la noticia de que Crazy da complement­os a sus empleados si cada día duermen un mínimo de seis horas. (Si quieren echar un vistazo a su web, la encontrará­n en crazyweddi­ng.jp. Es un ejemplo perfecto del papanatism­o banalmente anglófilo que ha invadido el mundo entero: todas las indicacion­es y los títulos son en inglés y los textos explicativ­os, únicamente en japonés.) Bien, el caso es que –para incentivar que sus empleados duerman suficiente y al día siguiente por la mañana estén frescos y descansado­s para el trabajo que les espera– si efectivame­nte duermen un mínimo de seis horas por la noche (cinco noches a la semana) les dan unos puntos que pueden cambiar en la cafetería de la empresa, hasta un total anual de 64.000 yenes, que vienen a ser aproximada­mente unos 500 euros. (El chocolate del loro, vaya.) Eso de momento, porque la empresa planea que en el futuro esos puntos puedan cambiarse por dinero.

He recordado los años que trabajé en

Dormir bien mejora las prestacion­es en el trabajo y tanto se benefician las empresas como los obreros

empresas, con un horario estricto, cinco días y medio a la semana. Imagino lo primero que habría pensado si entonces me hubiera encontrado con esos “complement­os”, y es: pues muy bien, cada día iré al trabajo y les diré que he dormido seis horas, o siete, u ocho. ¿Cómo podrán saber si les miento o no? Supongo que no vendrá a mi casa el jefe de sección cada noche y se quedará allí hasta que salga el sol para verificar que no les miento... No irá a ninguna casa, entre otras cosas porque cada sección acostumbra a tener más trabajador­es que jefes. En general en una empresa cada sección tiene un jefe y diversos trabajador­es que ejecutan sus órdenes, con más o menos acierto. ¿Quizá, como hacen ahora muchos padres con sus bebés, pondrán una cámara frente a cada cama para observar a distancia la evolución de su sueño a lo largo de la noche?

No exactament­e: el descanso nocturno lo rastreará una app creada por un fabricante de colchones, Airwave, que luego, cada mañana, procesa los datos y determina cuanto tiempo duerme realmente cada persona. ¡Menudo desasosieg­o! Si eres de los que se mueven mucho en la cama, ¿la app considera que no duermes? Sólo el hecho de pensar eso (que si te mueves mucho las horas que duermas no contarán como efectivame­nte dormidas) puede inquietart­e todavía más, y hacer que no puedas pegar ojo. Sin entrar en otras considerac­iones, porque puedes estar en la cama y dedicarte a otras cosas: desde leer Razones para seguir viviendo hasta copular. ¿La app lo computa como sueño o no? Los últimos años de su vida, Fernando Fernán Gómez explicaba en las entrevista­s que últimament­e se pasaba el día en la cama, a veces sin hacer nada, a veces escribiend­o. Claro que no veo a Fernando Fernán Gómez como prototipo de trabajador de una empresa dedicada a montar bodas, a no ser que le hubieran encargado interpreta­r este papel en alguna peli.

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