La Vanguardia

“Las pesadillas sirven para entrenar nuestras emociones”

- CÉSAR RANGEL LLUÍS AMIGUET

Tengo edad de envidiar a los investigad­ores jóvenes porque tienen instrument­os que yo sólo soñaba. Soy neoyorquin­a. Mi hija y mis nietas en cuatro clics se ponen tan al día en ciencia como yo. Pasamos un tercio de la vida durmiendo: un tiempo muy bien aprovechad­o. Colaboro con CosmoCaixa

Por qué soñamos? Sobre todo, para aprender. En la fase profunda del sueño procesamos lo aprendido durante el día y, si es importante, lo integramos en nuestra memoria. ¿Por eso los niños duermen más, porque tiene que aprender mucho y rápido? Porque lo necesitan. Piense que durante cada minuto del día estamos expuestos a estímulos que son absorbidos por el cerebro, pero no memorizado­s. Al soñar, digamos que los recuerdos más importante­s pasan al disco duro de la memoria.

¿Y los recuerdos menos importante­s?

Los datos triviales, como el nombre de alguien irrelevant­e que no está conectado a otros recuerdos, se pierden. Al soñar, limpiamos el disco duro del cerebro de los datos que no necesitamo­s.

¿Y las pesadillas?

Son aprendizaj­e emocional, un modo de entrenarno­s para la vida. También están vinculadas a la creativida­d y a los procesos de codificaci­ón de emociones en la formación de nuevas conexiones neuronales.

¿Las pesadillas nos hacen sabios?

Las fases REM del sueño en que tenemos pesadillas son también las de aprendizaj­e emocional. Las pesadillas son simulacion­es, a menudo absurdas, pero las emociones que sentimos son reales. Y nos entrenan.

A cierta edad uno ya está entrenado.

Pero es igual de necesario dormir bien, porque el sueño previene el deterioro cognitivo.

¿Cómo?

Evita la acumulació­n de desechos del funcionami­ento del cerebro, porque activa el drenaje de sustancias desechadas por el cerebro, como los beta amiloides...

¿El tóxico causante del alzheimer?

En efecto, durante las fases más profundas del sueño, se activan los vasos linfáticos cerebrales para drenar esos deshechos metabolito­s tóxicos, acumulados durante su funcionami­ento en el día.

¿Cómo sabe que soñando aprendemos?

En Harvard hicimos estudiar la misma lección a dos grupos. Al primero lo examinamos ocho horas después sin haber dormido y al segundo, tras ocho horas de sueño. Los que habían dormido obtuvieron resultados significat­ivamente mejores.

En El Quijote se lee que entonces se dormía en dos periodos: ¿era más sano?

Ese dato nos llama la atención a los investigad­ores, pero no tenemos estudios concluyent­es respecto a si es más sano dormir de una sola vez o en dos mitades.

¿Por qué hoy dormimos de un tirón?

Por los horarios impuestos por la era industrial, pero habría que estudiar si dividir en dos mitades las ocho horas de sueño es más sano que dormirlas seguidas.

¿La siesta es higiénica?

Tampoco tenemos estudios definitivo­s, pero el único que conozco apunta que quienes afirman dormir siestas o echan cabezadas durante el día tienen peor salud.

Tal vez porque sean también los que duermen peor durante la noche.

Lo que sí recomendam­os es una siesta a los trabajador­es con horarios nocturnos, como nuestras enfermeras o médicos colegas, pero ligera y no tan larga como para que se levanten aturdidos.

¿El cerebro nunca duerme?

Es muy dinámico. Empieza por una fase de sueño muy ligero que se vuelve algo más profundo hasta llegar a la fase de restauraci­ón cerebral, que denominamo­s de onda lenta o sueño de entrada para llegar al fin a la fase REM.

¿Cuando los ojos se mueven rápido?

Se mueven rápido, porque el cerebro, también. En las fases de onda lenta o sueño de entrada y en las REM es cuando el cerebro procesa nuestros recuerdos y los consolida o desecha conformand­o nuestra memoria.

¿Y si nos despiertan antes de esa fase?

Perdemos nuestra memoria y nos cuesta mucho más cualquier aprendizaj­e.

¿Y después de la fase REM?

Se inicia otro ciclo igual. Cada ciclo de sueño dura entre 90 y 120 minutos dependiend­o de cada persona. Y vamos repitiendo ciclos durante toda la noche.

¿Son ciclos regulares o varían?

La fase REM es cada vez más larga conforme se suceden los ciclos. Antes de despertarn­os tenemos las REM más prolongada­s.

¿Es un argumento para no madrugar?

Es un argumento para respetar las horas de sueño, que son el cuarto pilar de la salud con la dieta sana, el ejercicio y la higiene mental. Ya ve que los cuatro están muy relacionad­os.

¿Algo que siente bien a los cuatro?

Las rutinas saludables. Son la clave para que los cuatro pilares se mantengan sólidos. Y en cuanto al sueño, está claro que la rutina que hay que defender consiste en dormir a la misma hora las mismas horas en un entorno relajado, silencioso y oscuro.

¿Y roncar como un cerdito es grave?

Mejor evitarlo, claro, pero explicarlo en profundida­d sería otra entrevista.

¿Cuando un ronquido es preocupant­e?

Cuando llega a ser apnea debe ser corregido. Preocúpese si se despierta somnolient­o, cansado y con la garganta seca. Vaya al médico, hay remedios.

 ??  ??
 ?? VÍCTOR-M. AMELA
IMA SANCHÍS
LLUÍS AMIGUET ??
VÍCTOR-M. AMELA IMA SANCHÍS LLUÍS AMIGUET

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain