Sitges limita la oferta de uso turístico al 9% de su parque de vivienda
El Ayuntamiento de Sitges ha aprobado la norma que regula las viviendas de uso turístico (VUT) en el municipio, aplicando restricciones por zonas. Sitges sólo podrá dedicar el 9% de las viviendas totales del municipio a uso turístico y vacacional. Inicialmente se había previsto limitarlo al 10%.
El alcalde, Miquel Forns, afirma que las viviendas de uso turístico “las queremos de calidad y cumpliendo la normativa”. La aprobación de estas limitaciones se ha hecho de forma provisional ya que la modificación del plan general requiere de la aprobación definitiva de la Generalitat. Estos pisos de uso turístico, según el Ayuntamiento, “han producido episodios de excesiva concentración que han podido provocar conflictos de convivencia y superar la capacidad de determinados equipamientos públicos”. Las nuevas licencias se suspendieron por un año en diciembre del 2016, periodo que se ha prorrogado un año más.
El presidente del Gremio de Hostelería, Joan Anton Matas, celebra la regulación, pero dice que “el problema es la falta de control de las viviendas ilegales”. El vocal del gremio en representación de las VUT, Josep Daranas, dice que hay de 1.000 a 1.500 ilegales, y 1.741 legalizados. No le parece bien que “sólo se limite sin asegurar el control de los que operan fuera de la ley”. La concejal de Promoción Económica, Aurora Carbonell, expresa que son conscientes de
La ciudad tiene entre 1.000 y 1.500 alojamientos ilegales y 1.741 que están legalizados
que “tenemos que ir más allá para ser efectivos”. Anuncia un régimen sancionador, la formación de un cuerpo de inspectores y que se perseguirá a los ilegales.
Sitges también ha aprobado el plan de usos del Casco Antiguo. Según el alcalde, “consolidará el potencial comercial y el atractivo del centro urbano”. Con la regulación de la distancia entre establecimientos o la prohibición de algunos usos se quiere conseguir “la calidad”.