Una mujer en el manga
Elsa Brants, creadora del manga ‘Sálvame, Pythie’
La dibujante francesa Elsa Brants ha visitado el Salón del Manga de Barcelona para presentar Sálvame, Pythie, un cómic ambientado en la mitología griega dibujado con el estilo del manga japonés.
Un enloquecido manga ambientado en la Grecia de los dioses olímpicos. Su protagonista es Pythie, una joven que, como Casandra, predice el futuro pero nadie la cree. Y que ayuda a Janto, hijo secreto de Zeus, en su torpe, torpísimo, camino hacia la gloria de los héroes. Un cómic al estilo nipón escrito y dibujado... por una autora francesa. Es Sálvame, Pythie (LetraBlanka editorial), de Elsa Brants (Montpellier, 1975), que ha sido una de las invitadas al Salón del Manga.
¿Cómo se interesó en el mundo del manga?
Desde pequeña me gustaba leer novelas, obras históricas, cómic, manga. Eran amigos que me permitían soñar, liberarme, viajar sin salir de casa. Elegí contar mis historias con imágenes porque tengo la impresión de que puedes contar más cosas que sólo con palabras. Transmitir más emociones, explicarte mejor con el texto y los dibujos a la vez. Y con la manera como dibujas los personajes. Me parece el medio más completo. Y elegí dibujar manga más que cómic al estilo francobelga porque mi generación creció viendo muchos dibujos animados japoneses en televisión. Y porque la manera de narrar del manga es más expresiva que la del cómic de mi país, ya que tiende a la exageración de los sentimientos, las actitudes y las expresiones. Permite transmitir las emociones aún más fácilmente.
¿Tenía interés también por Japón, por su cultura?
Gracias al anime me interesé por la cultura japonesa y desde que soy adulta he ido varias veces a aquel país para poder empaparme de la historia, de los templos, de la vida cotidiana y ancestral. Y para comer japonés, muy importante.
Está escribiendo una autobiografía de por qué ama el Japón.
En este momento llevo la mitad, cien páginas. Es un encargo de una editorial japonesa que me ha pedido explicar por qué hago manga siendo francesa, ya que el gran público japonés no se da cuenta del gran interés que Europa tiene por el manga. Lo escribo con mucho humor, porque sobre todo me gusta divertir a la gente. Cuando leo algo me acuerdo mucho más de lo que me hace reír. Hay muchos autores con historias tristes, de amor. Yo tengo facilidad para hacer reír y me interesa más.
¿Por qué el mundo de la Grecia clásica para un manga?
Es mi primera serie de manga donde, además de dibujar, escribo la historia. Para mi primer trabajo completo quise escoger algo que conociera bien. Y amo la mitología griega desde niña. He leído mucho. Y escogí que mi historia sucediera en ese universo, conociendo bien la base para poder crear nuevas aventuras a partir de las viejas historias.
¿No había otro personaje más humorístico que Casandra, cuyas predicciones no creía nadie?
El mito de Casandra en sí mismo me impresionaba, porque es una mujer que dice: “Atención, que va a suceder alguna cosa”. Y nadie la cree. Eso pasa con mucha frecuencia. Sólo porque es mujer. Y tiene razón. Es triste. Pero el mundo de los dioses griegos es muy divertido, con sus líos amorosos, sus transformaciones, los dioses que engañan a las diosas, las diosas que se vengan... si pude apreciar la mitología de pequeña es porque un profesor me la hizo ver de manera divertida.
¿Cómo es Pythie, su particular Casandra?
Una joven muy actual que no tiene miedo de decir lo que piensa, ni hacer lo que tiene ganas de hacer, y no se deja dirigir por los hombres. No es una heroína en apuros, no me interesa, las niñas necesitan tener heroínas más poderosas. Es fuerte, no siempre tiene suerte ni buenas ideas, pero suele irle bien
¿La presencia femenina en el cómic está cambiando por fin?
Somos cada vez más numerosas las que nos atrevemos a convertirnos en autoras y es lo que está sucediendo en todos los oficios, artísticos o no. Hacer aquello de lo que una tiene ganas y antes no era posible.
“Casandra es una mujer que dice que sucederá algo y nadie la cree. Eso pasa con frecuencia”