Catalunya debe gastar 1.500 millones más
Catalunya debería gastar 1.500 millones de euros adicionales en educación para equipararse a la media española del PIB destinada a este ámbito, el 4,4% (Catalunya está en el 3,9%), según el trabajo presentado ayer por la Fundació Jaume Bofill en la jornada ¿Dónde tienen que ir los recursos en educación en los próximos años? La fundación recuerda que las políticas de austeridad representaron una reducción drástica del gasto público en educación entre el 2009 y el 2015, que conllevó un empeoramiento de las condiciones de educabilidad de los alumnos y de trabajo de los docentes. Sin embargo, considera que el sistema educativo en los últimos diez años ha mejorado sus resultados globales gracias a factores como la “resiliencia y conciencia” de responsabilidad social del profesorado, el efecto de programas y políticas iniciadas antes de la crisis y el incentivo de no abandonar los estudios provocado por la crisis. A partir del análisis comparativo, la Fundació Bofill plantea la necesidad de incrementar el porcentaje del PIB hasta llegar a la media europea, el 5,1%, lo que supondría 3.000 millones adicionales en educación. Sin embargo, ve un escenario “más posibilista”, equiparar la inversión a la media española, situada en el 4,4%, unos 1.500 millones más.