La CSU gobernará Baviera junto a un partido local
El desenlace de los comicios del land alemán de Baviera, celebrados el pasado 14 de octubre, se materializó finalmente ayer en Munich. El Parlamento regional eligió presidente del land a Markus Söder, cuyo partido, la Unión Social Cristiana (CSU), perdió en las urnas la mayoría absoluta que había tenido de modo casi ininterrumpido durante decenios. Söder pudo ser elegido gracias al respaldo del pequeño partido local Electores Libres, de tenor derechista y fuerte arraigo municipal, con el que la CSU ha firmado un acuerdo de coalición. Su líder, Hubert Aiwanger, de 47 años, será el ministro regional de Economía.
Markus Söder, de 51 años, recibió el apoyo de 110 de los 202 diputados del Parlamento bávaro que votaron, y pudo así repetir como presidente de este próspero estado federado sureño. Había accedido al puesto en marzo, en sustitución de Horst Seehofer, quien se mudó a Berlín como ministro del Interior del Gobierno de gran coalición de conservadores y socialdemócratas de la canciller Angela Merkel. Seehofer, de 69 años, continúa siendo el presidente de la CSU.
Pero el flojo resultado de los socialcristianos en las elecciones (tuvieron el 37,2%, es decir, 10,5 puntos menos que en las elecciones del 2013) puede deparar aún un segundo desenlace. Según muchos diarios alemanes, Seehofer podría renunciar a la presidencia del partido, en un esquema similar al de Angela Merkel, que la semana pasada anunció que no se presentaría a la reelección como líder de su formación, la Unión Cristiana Demócrata (CDU).
Seehofer podría anunciar esa decisión la próxima semana, y se formalizaría en el congreso de la CSU del 8 de diciembre, que elegiría presidente a Söder. Se responsabiliza a Seehofer de la caída de votos de la CSU en Baviera, y también de azuzar la tensión en la coalición de Gobierno.