Europa quiere las botellas con su cierre
La Unión Europea está preparando una nueva legislación para obligar a los fabricantes a producir todas las botellas y envases con los tapones unidos a los envases, para evitar que se puedan separar y un mismo producto origine dos tipos de residuos plásticos, como sucede ahora en la mayoría de los casos. El contexto, la guerra que Europa ha declarado al plástico. “La nueva normativa de la Unión Europea quiere evitar que los tapones acaben vertidos en el medio ambiente”, destaca Josep Maria Tost, director de l’Agència de Residus de Catalunya (ARC). “Si se tiran al contenedor separados del envase y las botellas lo más probable es que se acaben perdiendo y vayan junto a la fracción resto de cada planta de tratamiento de residuos y no entren al circuito de reciclaje”, advierte Jordi Pietx, gerente de Ecoembes en Catalunya.
Por su experiencia, Ecoembes asegura que la mayoría de veces los ciudadanos tiran la botella y el envase junto a su tapón. “La nueva normativa hará que físicamente el tapón vaya siempre unido con la botella, se mejorará”, añade Pietx. Ecoembes no dispone de los porcentajes actuales de envases tirados con su tapón o por separado. Algunas botellas, especialmente de agua o de bebidas isotónicas, ya llevan unido físicamente el tapón a su envase. La nueva normativa europea, en fase de tramitación, amenaza el futuro de la diversidad de campañas solidarias en base a la recogida del tapón.