Récord de emisiones
Dióxido de carbono (CO2)
Es el principal gas de efecto invernadero. Su concentración alcanzó 405,5 ppm en el 2017, lo cual representa el 146 % de su nivel en la era preindustrial (antes de 1750). La tasa de aumento deCO2 entreel2016yel 2017 fue igual a la media durante los últimos diez años.
Metano (CH4)
El metano es el segundo gas de efecto invernadero y contribuye en cerca de un 17% al calentamiento. Aproximadamente el 40% del metano que se emite a la atmósfera procede de fuentes naturales (por ejemplo, humedales y termitas). El 60% proviene de actividades humanas (ganadería de rumiantes, cultivo de arroz, explotación de combustibles fósiles, vertederos…).
Óxido nitroso (N2O)
Las emisiones de óxido nitroso (N2O) a la atmósfera provienen de fuentes naturales (en torno al 60 %) y de fuentes antropogénicas (un 40%), incluidos los océanos, los suelos, la quema de biomasa, el uso de fertilizantes y diversos procesos industriales. El 2017 su concentración atmosférica fue de 329,9 partes por mil millones, es decir, un 122% de su nivel en la era preindustrial. Es el causante de un 6% del forzamiento radiativo provocado por los gases de efecto invernadero de larga duración.
Triclorofluorometano (CFC11)
El boletín contiene una sección especial dedicada al triclorofluorometano. Se trata de un potente gas de efecto invernadero que también agota el ozono estratosférico y está regulado en el marco del protocolo de Montreal. Desde el 2012, el ritmo de disminución en la atmósfera ya no es tan acelerado. La causa más probable de este ritmo de disminución más lento es un aumento de emisiones vinculadas a la producción de CFC-11 en Asia oriental.