Tiziana Domínguez y Teresa Helbig celebran sus orígenes
Fiestas en homenaje a Adolfo Domínguez y Teresa Blasco
Teresa Blasco y Adolfo Domínguez no se conocen aunque tienen en común su dominio de la costura pero el destino hizo que el miércoles por la noche fueran los protagonistas de la noche barcelonesa gracias a la admiración que le profesan sus hijas. En el invernadero de Bornay, en el barrio de Les Corts, la diseñadora Teresa Helbig le organizó una fiesta a su madre por su 80 cumpleaños. Y en el paseo de Gràcia, Tiziana Domínguez inauguró la remodelada tienda que será el flagship de la firma que creó su padre.
Helbig explicó que su progenitora le contagió el amor por la alta costura y le enseñó “que hay que buscar siempre la excelencia, que está en lo que a primera vista no se ve”. En el invernadero, exquisitamente decorado, familia, amigos y clientes quisieron acompañar a la diseñadora y a su madre en la fiesta. No faltaron algunas de las chicas Helbig como las actrices Macarena Gómez, Cristina Brondo o Mireia Oriol, la modelo Davinia Pelegrí o la presentadora Bibiana Ballbé.
El momento más divertido fue cuando Teresa Helbig y su equipo cantaron y bailaron Mamma mia, de Abba. Zinash, la hija pequeña de la diseñadora, adoptada en África, en vez de actuar prefirió corretear por la fiesta junto a Dante, el hijo de Macarena Gómez .
En la otra punta de la ciudad, Tiziana Domínguez, la hija pequeña de Adolfo Domínguez, ejerció de anfitriona de la reinaguración de la tienda, que es más luminosa y minimalista. “No soy diseñadora, quería ser artista y estudié economía pero he crecido en la tienda, jugando con retales, viendo los desfiles...”, dice. Ella se encarga de la línea de mujer, y de los accesorios, además de los escaparates y de la selección de producto en las tiendas. “Ahora mi hermana Adriana es la que manda, pero seguimos los valores que mi padre dio a la marca, de sencillez, ecología, consumo responsable... y cierta intelectualidad”. Adolfo Domínguez acaba de publicar su primer libro, Juan Griego, una novela que ha tardado 35 años en escribir. “Te la recomiendo”, dice orgullosa su hija. Entre los invitados, el modelo y empresario vitivinícola Oriol Elcacho, que dejó a su pareja, Davinia Pelegrí, en la fiesta de Helbig; y Cristina Brondo, que también hizo doblete.
La diseñadora festejó los 80 años de su madre y la hija del modisto gallego reinauguró una tienda en Barcelona