Ribera estudia ayudas al transporte pesado para su transición al gas
La ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, señaló ayer que “no es descartable” que el Gobierno tenga que aplicar una política de ayudas a sectores como el del transporte pesado, el ganadero y el marítimo, que en su transición hacia una energía limpia deberán pasar primero por el gas. Ribera apuntó que esos colectivos pueden tener “mayores dificultades para adaptarse a la transición energética”.
Tras participar en una jornada del 25.º aniversario de la Asociación Española de Operadores de Productos Petrolíferos (AOP), Ribera abrió la puerta a modificaciones en algunos puntos del anteproyecto de ley que prohibirá la venta y circulación de vehículos de combustión e híbridos para el 2040 y el 2050, respectivamente. No obstante, recalcó que son fechas más “cautelosas que las que han ofrecido otros países de nuestro entorno”.
Al sector petrolero, le invitó a “trabajar juntos” para llegar a las cero emisiones y cumplir la normativa medioambiental.
Por su parte, el presidente de la patronal, Luis Aires, recordó al Gobierno que el sector petrolero ha invertido 27.417 millones en los últimos 25 años, a razón de más de 1.000 millones por año “incluidos los de la crisis”. El directivo señaló que “las prohibiciones generan incertidumbres y ya ha afectado a las ventas de vehículos diésel”. Aires puso sobre la mesa que en España, de los 23 millones de turismos que hay en circulación, “sólo 25.000 son puramente eléctricos”. Además, criticó que el anteproyecto recoge multas de “hasta 30 millones de euros” para las enseñas que no pongan puntos de recarga en sus gasolineras. “¿Quién paga esas inversiones obligatorias?”, se preguntó.
El acto fue clausurado por la ministra de Industria, Reyes Maroto, que insistió en que el anteproyecto “sólo es un documento de trabajo” que ni siquiera ha pasado por el Consejo de Ministros.
En el acto estaban los principales ejecutivos de compañías como Cepsa, con su consejero delegado, Pedro Miró; Repsol, Josu Jon Imaz y Antoni Brufau, o el presidente de BP España, Luis Aires, entre otros.
Tras el acto, algunos de estos ejecutivos plantearon a la ministra de Industria la posibilidad de congelar inversiones si no se cambia la hoja de ruta fijada por el Ejecutivo de Pedro Sánchez. Maroto se mostró abierta a reunirse con el sector petrolero, como ha hecho con las patronales automovilísticas. Recordó que se van a formar 15 agendas industriales para identificar las claves y fortalezas de cada sector. La del sector petrolero se presentará el 21 de enero del 2019.