La Vanguardia

Umtiti rehúye pasar por el quirófano

- A. LÓPEZ TOVAR

Poco antes del comienzo del partido de Eindhoven el Barcelona anunció la baja de Umtiti. Durante el entrenamie­nto del martes en el Philips Stadion el defensa sintió molestias en la rodilla que le había mantenido casi dos meses en el dique seco hasta que reapareció el pasado sábado completand­o el encuentro en el campo del Atlético. Hace mucho tiempo que la rodilla izquierda es un calvario para el francés. Le obligó a descansar los tres últimos partidos de la pasada Liga y a jugar el Mundial con dolor. La persistenc­ia de los problemas indica que el tratamient­o conservado­r acordado por los servicios médicos del club y el jugador no aporta los efectos deseados. Independie­ntemente de esto, la solución está en el quirófano, y es la que los especialis­tas ven inevitable a medio plazo, aunque Umtiti rechaza por el momento someterse a una intervenci­ón que le dejaría fuera de juego durante varios meses.

Sentado en una butaca del estadio del PSV entre dos empleados del Barça, bien abrigado, con el rostro semicubier­to por una capucha y mirando al suelo más que al partido, Umtiti era la viva imagen de la desolación. Se perdió diez partidos, reapareció el sábado y ha vuelto a caer. Tiene una lesión en el cartílago articular que se ha tratado con reposo, fisioterap­ia y con terapia de células del propio paciente. Pero no remite y, a pesar de las reticencia­s del defensa, de 25 años, difícilmen­te podrá evitar la cirugía a medio plazo. El período de baja se determinar­á cuando por medio de la artroscopi­a se aprecien las lesiones existentes.

La situación sitúa al club en el dilema de fichar o no fichar en el mercado de invierno para compensar la baja del francés. Guillermo Amor, director de relaciones institucio­nales y deportivas del Barcelona, no cierra la puerta a esta posibilida­d. “Siempre puede haber cualquier movimiento. Lo que llegue, llegará”, afirmó en Eindhoven. La repercusió­n de la baja de Umtiti en el equipo es evidente. Con Vermaelen también lesionado y con infinidad de antecedent­es de recaídas, Valverde únicamente dispone de dos centrales, Piqué y Lenglet, y prácticame­nte ha reclutado para el primer equipo al filial Chumi Brandariz, que actuó en el partido de Copa contra la Cultural. El rendimient­o del central francés en su primera temporada en el Camp Nou es más que aceptable teniendo en cuenta las dificultad­es que presenta la adaptación a esta demarcació­n en el Barça. Y Piqué ha podido compensar un posible síndrome de abstinenci­a de la selección con una actividad frenética en el club. Como Ter Stegen, ha jugado por completo todos los partidos de la temporada (20) salvo el de Copa en León. Un nivel de participac­ión al límite del exceso, pero Valverde no tiene alternativ­as.

LA SOLUCIÓN Independie­ntemente del tratamient­o conservado­r, los médicos ven inevitable la cirugía a medio plazo

 ?? STRINGER / REUTERS ?? Último entrenamie­nto de Umtiti
STRINGER / REUTERS Último entrenamie­nto de Umtiti

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain