Noche de excepciones
Refree
Lugar y fecha: L’Auditori (1/XII) El ciclo Sit Back de L’Auditori acogió la presentación de La otra mitad, el nuevo disco de Raül Fernández Refree, que se pone a la venta en pocos días. Esta producción se alimenta en gran parte de las composiciones que el músico barcelonés ha elaborado para la banda sonora de film de Isaki Lacuesta Entre dos aguas, de estreno muy reciente, y distinguido con la Concha de Oro por el Festival de Cine de San Sebastián. El concierto en la sala Tete Montoliu fue una fiel muestra de la polifacética actividad creativa de nuestro protagonista, arrojando un saldo final de aúpa, siendo especialmente significativo el tramo final de la noche, cuando aparecieron Rocío Márquez y Francisco Contreras Molina, más conocido como El Niño de Elche.
Refree compareció armado con dos guitarras acústicas, una eléctrica y pedalería. Piezas instrumentales (diversas tomas de sus improvisaciones Ramírez, Telecaster...), y canciones de su discografía anterior (La festa, Un buen tío, La nit ben alta...) ocuparon los primeros minutos de la sesión, junto a cosas tan bonitas como unos tientos reforzados con los Fandangos negros sampleados, y el nervio de Niño perdío. Con la cantaora Rocío Márquez ya en el proscenio, la bella Tiranía precedió a Cuando salga el sol y unas extraordinarias, eléctricas y abismales seguiriyas que debemos contar entre lo mejor de la propuesta.
Lo mismo puede decirse del tema que Refree (tocando esta vez el piano de cola) facturó en el primer bis junto a El Niño de Elche. Raül manejaba el instrumento de espaldas al público, como daban misa los curas de antes, cosa muy indicada para la ocasión, ya que los versos que desgranaba el cantaor discurrían por coordenadas místicas; mística espectral, cabe apuntar, también por el deslumbrante y tantas veces tempestuoso trabajo de Fernández en las teclas (y también rasgando directamente las cuerdas del piano). Un bis improvisado con Rocío Márquez al cante y Refree y el Niño al toque, además del rescate a solas por parte de Raül de la Nana al niño que nació muerto (versos de Gloria Fuertes) redondearon esta noche de excepciones.