Más vigilancia en los barrios de los autores del tiroteo de Nou Barris
Tanto los Mossos d’Esquadra como la Guardia Urbana de Nou Barris han incrementado la presencia de sus patrullas en los barrios en los que habitan los protagonistas del tiroteo que el lunes provocó heridas de bala a cuatro personas. Las víctimas evolucionan favorablemente, y el conocido como patriarca del clan de los Jiménez, de Can Peguera, ya está fuera de peligro tras unas horas críticas.
El incidente a tiros y a plena luz del día se produjo tras una discusión previa en el metro entre un miembro de los Jiménez y una joven de los Lisardo, que viven en el conocido popularmente como el Bronx, junto al centro comercial Heron City. La ruptura sentimental, ya hace meses, entre un joven de los Jiménez y la joven de los Lisardo provocó una enemistad entre las dos familias que el lunes desencadenó unas escenas grabadas por un transeúnte y la cámara de seguridad de un furgón de Prosegur que pasaba por allí en el momento de los disparos.
Tras el incidente, el gran temor de los responsables policiales de Barcelona era que se produjeran escenas de venganza o un destierro por parte de la familia del autor de los disparos, parecido al que el año pasado hubo en La Mina y que causó el éxodo de un centenar de personas.
Ayer, en cambio, los dos barrios estaban tranquilos y los vecinos, preferiblemente en sus pisos, por si acaso. Ningún miembro de los Lisardo, la familia del autor de los disparos, se había movido ayer de su casa, mientras que los Jiménez mantenían su guardia a las puertas del hospital Vall d’Hebron donde están ingresados sus familiares heridos. Los responsables policiales de Nou Barris celebrarán esta mañana una reunión para analizar la situación. Entre tanto, el grupo de homicidios de Barcelona trabaja para localizar y detener al autor de los disparos.
La situación es tranquila y ningún familiar del autor de los disparos se ha movido de su casa