Agua regenerada, la clave para proteger las reservas del Llobregat y hacer frente a sequías
El AMB continúa con la iniciativa de aprovechar al máximo los recursos propios y, a la puesta en marcha de la ERA del Llobregat, se suma la creación de un grupo de expertos para estudiar todos los usos del agua regenerada
La estación de regeneración de Aguas de El Prat de Llobregat (ERA) dio pistoletazo de salida el pasado mes de abril, y entró en funcionamiento tras el convenio firmado entre el Área Metropolitana de Barcelona (AMB) y la Agència Catalana de l’Aigua (ACA). El objetivo es obtener un agua de suficiente calidad como para ser reutilizada en diferentes usos tras tratarse en la mencionada depuradora (en lugar de verterse directamente al mar, como ocurre con el agua depurada convencional).
Por otra parte, la finalidad es mantener el buen estado de los acuíferos del valle bajo y el delta del río Llobregat, así como frenar la intrusión salina.
El vicepresidente de Medio Ambiente del AMB, Eloi Badia, ha querido destacar “la importancia de la planta regeneradora”, a lo que ha añadido que esta acción “se enmarca dentro de la política del AMB de aprovechar al máximo los recursos propios para no depender de cuencas externas. Buscamos soluciones propias”, explica.
GARANTIZAR RESERVAS MÍNIMAS
Aunque es cierto que últimamente la situación no ha sido tan crítica y las condiciones climáticas han permitido la recuperación del nivel de los embalses, el arranque de la estación de aguas residuales del Prat es clave para aumentar la garantía de suministro en el Área Metropolitana de Barcelona. Por ejemplo, en el caso de una sequía se calcula que podrá cubrir el 25% de la demanda total.
La medida se ha llevado a cabo gracias al acuerdo entre la ACA y el AMB, y ambas administraciones tendrán una función fundamental en dicho proceso: por un lado, la ACA establecerá mensualmente el volumen de agua que se debe producir según el estado hidrológico actual y, por otro lado, el AMB se encargará de hacer el seguimiento de los niveles de agua ya tratada.
El convenio será financiado en gran parte por la ACA, que aportará hasta 4,5 millones de euros para cubrir los gastos de explotación de la planta de tratamiento terciario de la depuradora del Llobregat.
Primero, se prevé unos costes de explotación de la planta cuantificados en 2,5 millones de euros y la posibilidad de incorporar 1 millón de euros más en caso necesario. Y se dispondrá de otro millón de euros más en el caso de que sean necesarias actuaciones de mejora de las instalaciones.
La construcción consiste, por un lado, en la planta de tratamiento terciario de la depuradora de El Prat de Llobregat y, por otro, los pozos contra la intrusión salina, la planta desalinizadora de Sant Boi, las balsas de recarga del valle bajo de Llobregat y, por último, el bombeo de agua al río.
COMITÉ DE EXPERTOS
El acuerdo también ha creado un comité de expertos del AMB, la ACA y el Departamento de Salud Pública de Catalunya (ASPC) con el objetivo de planificar una hoja de ruta que determinará el funcionamiento de las instalaciones, así como para llevar a cabo el análisis de avanzar la aportación de agua en el tramo final del río Llobregat en continuo, y no únicamente en los periodos de sequía. Es decir, garantizar las reservas de agua durante el máximo tiempo posible en los embalses de la depuradora.
El comité contará con la presencia de doce miembros expertos en el ciclo integral del agua y en la evaluación de riesgos para el medio ambiente.
Des del AMB destacan “la importancia del agua regenerada y el impulso de la reutilización como un eje estratégico del modelo de gestión de agua sostenible y en línea con la economía circular y la lucha contra el cambio climático”.
La regeneración de aguas permitirá obtener un agua de calidad suficiente para un segundo uso Los objetivos de la medida son frenar la intrusión salina y mantener el funcionamiento de los acuíferos