Con todas las precauciones
La puerta 89 del estadio del Espanyol lleva el nombre de Ernesto Valverde. El Txingurri efectuó una gran labor en dos temporadas en el banquillo blanquiazul en las que llevó al equipo a disputar una final de la Copa de la UEFA y a no encogerse en los derbis. La estancia de Valverde en el Espanyol se saldó con una victoria y tres empates contra el Barcelona en la Liga. Ayer, retrocedía al año 2006 para recordar de manera un poco confusa aquel triunfo 3-1 en Montjuïc que consiguió enervar al flemático Frank Rijkaard hasta el punto de romper de un puñetazo la cubierta del banquillo. Ahora, nadie como Valverde comprende la llamada de Rubi a vencer por primera vez al Barça en el campeonato en el nuevo campo. “Poder ganar un derbi es algo, pero poder ganarlo por primera vez en su estadio es significativo. Rubi está jugando un poco para motivar a sus jugadores. Me parece bien”.
Cómo se manejará el Espanyol de Rubi en su gran acontecimiento del curso es una incógnita. “Espero un derbi igualado porque no hay mucha distancia entre los dos equipos”, auguró Valverde, y profundizó: “En cualquier caso, si la hubiera la diferencia se iguala porque es un partido que se juega mucho desde el corazón y un poco desde la cabeza, y con todos esos ingredientes que tienen esos partidos de rivalidad”.
El entrenador blaugrana recordó la fortaleza del Espanyol en su estaante dio para subrayar la transcendencia del desafío para un Barça fluctuante tanto en juego como en resultados. “Para nosotros es una prueba de fuego –dijo– porque a todos los equipos nos está costando conseguir puntos fuera de casa. La liga esta igualada por eso”.
Valverde espera un ambiente de respeto en las gradas en un partido en el que “puede haber muchas alternativas”. Sin que lo mencionara explícitamente, la precaución y el control serán prioritarios para su equipo: “Ellos tienen jugadores que generan peligro y tenemos que estar atentos. Preveo un partido en el que, si se rompe, puede haber muchas ocasiones por los dos bandos. Tenemos que valorar que si se rompe sea a nuestro favor, no de ellos”.
Cornellà puede ser el escenario del regreso de Luis Suárez después de varias ausencias motivadas por recurrentes molestias en una rodilla. Según el entrenador, la presencia o no del uruguayo marca al equipo de manera significativa. No espera Valverde un marcaje al hombre para Messi. No es el estilo de Rubi, director de un Espanyol “que trata de ir a buscarte, que trata de mantener la pelota, que sigue teniendo gran velocidad arriba y te puede matar en una contra”.