Paso hacia la paz en el Sáhara
La negociación de Ginebra seguirá en el 2019 en busca de “cooperación, no enfrentamiento”
Sin resultados, pero con esperanza. Nada en claro, pero nada perdido. La primera mesa redonda convocada por el enviado especial de la ONU para el Sáhara Occidental, el alemán Horst Köhler, se ha cerrado en Ginebra sin resultados concretos, pero con el compromiso de todas las partes, Marruecos, el Frente Polisario, Argelia y Mauritania, de volver a encontrarse durante el primer trimestre del próximo año, posiblemente en marzo, con el objetivo de lograr una “solución política realista, pragmática y duradera” al conflicto.
Nadie esperaba avances significativos después de siete años de parón en los intentos por hallar una solución al problema del Sáhara. Sin embargo, todas las partes salieron muy satisfechas del ambiente “sereno y positivo” que se ha vivido en la ciudad suiza y rubricaron en el comunicado final su intención de que “la cooperación y la integración, y no el enfrentamiento, constituyen la mejor manera de hacer frente a los desafíos de la región”.
Las delegaciones de los países presentes estuvieron presididas por sus respectivos ministros de Asuntos Exteriores, mientras que Katri Adduh, presidente del Consejo Nacional, ostentaba la representación del Frente Polisario. El titular marroquí de Exteriores, Naser Burita, se felicitó expresamente de que Argelia, “país que se encuentra en la génesis y el mantenimiento de este conflicto”, haya participado por primera vez como parte implicada y a una escala ministerial.
“El tiempo de la diplomacia bilateral parece que ya ha sido superado”, señaló Burita, quien no dudó en atribuir el cambio en la postura argelina a los recientes llamamientos
El reciente deshielo entre Marruecos y Argelia puede ser clave en el desbloqueo del conflicto
llevados a cabo por el rey Mohamed VI a sus vecinos magrebíes para normalizar sus relaciones de una vez por todas.
La delegación marroquí no quiso, sin embargo, echar las campanas al vuelo ante una posible solución. “Marruecos considera que la atmósfera serena que se ha vivido en Ginebra no es suficiente para un relanzamiento del proceso pilotado por la ONU, por lo que Marruecos espera que la segunda mesa redonda del 2019 suponga el compromiso de todas las partes para llevar a cabo una discusión política profunda. No queremos participar en más discusiones estériles que serán una pérdida de tiempo para la comunidad internacional en la solución del problema”, señala el comunicado oficial de los representantes marroquíes.
Por su parte, el Frente Polisario señala que está satisfecho del tono que se ha utilizado por todas las partes en las conversaciones de Ginebra, ya que “una solución negociada es vital para el futuro del Sáhara Occidental y toda la región del Magreb en su conjunto”.
El Polisario celebra la implicación de la ONU, de Estados Unidos y de la Unión Africana en impulsar la búsqueda de un acuerdo, al tiempo que lanza una crítica durísima a la UE, que “sigue firmando acuerdos comerciales con Marruecos en los que se incluye el territorio del Sáhara Occidental, en una clara violación de las normas de la Corte Europea de Justicia”. Los representantes saharauis hacen un llamamiento a los “líderes europeos para que utilicen la ventana de oportunidad que se ha abierto para apoyar los esfuerzos de las Naciones Unidas, y usar los acuerdos económicos y el comercio de una manera constructiva y como un incentivo positivo para la paz”.