Actitud irreductible
Loquillo
Intérpretes: Loquillo, voz; Igor Paskual, guitarra; Josu García, guitarra; Mario Cobo, guitarra; Lucas Albaladejo, teclados; Alfonso Alcalá, bajo; Laurent Castagnet, batería
Lugar y fecha: Palau Sant Jordi (14/XII/2018) José María Sanz Beltrán representa el milagro de la continuidad en un mundo tan inestable como el del rock español. Una larga y fecunda carrera, la de este artista barcelonés del Clot, que arrancó hace cuarenta años bajo el apelativo de Teddy Loquillo y sus Amigos, una banda en la que también figuraba Carlos Segarra (Los Rebeldes). Para alcanzar sus primeros éxitos a partir de 1980 con Loquillo y los Intocables, junto al buen compositor Sabino Méndez. Hasta consolidarse posteriormente entre los grandes del panorama nacional con Loquillo y Trogloditas, una formación que permaneció activa de 1983 a 2007.
Desde entonces, Loquillo ejerce como solista rodeado de músicos de una calidad contrastada. Como quedó meridianamente claro en el concierto 40 años de Rock and Roll Actitud, que ofreció anteanoche en un Palau Sant Jordi medio lleno, y coincidiendo con el lanzamiento de un triple disco recopilatorio homónimo.
Ataviado con un traje de cuero negro y gafas de sol, Loquillo abrió con el tema Rock and Roll Actitud, toda una declaración de principios ilustrada con imágenes de las portadas de sus discos. El concierto, que en sus primeras fases se hizo un tanto espeso, adquirió una mayor brillantez en su segunda parte y recta final. Entre los highlights de un repertorio con más de treinta canciones en liza, cabe destacar El rompeolas, que contó con un gran trabajo de Mario Cobo a la steel guitar y con los coros multitudinarios de un público entregado. Para poco después, soltar un sensacional Rock suave con un potentísimo solo de Igor Paskual. Con tres guitarristas en escena y la propulsión a chorro del fenomenal batería Laurent Castagnet, la formación carburó a todo gas y sonó de maravilla.
En el capítulo de versiones, Loquillo estrenó su adaptación de Rey del glam de Alaska y Dinarama, y también releyó con acierto otras gemas del pop-rock español como Qué hace una chica como tú en un sitio como este de Burning (con Leiva de invitado) o Mi calle de Lone Star. Todo ello en un vibrante y bien trenzado tramo final en el que sonaron temas tan emblemáticos como Chanel, cocaína y Dom Perignon, Quiero un camión (en una extensa versión con el teclista Lucas Albaladejo como gran figura), Esto no es Hawai, Rock & Roll Star (con Sabino Méndez) o Feo, fuerte y formal. Antes de cerrar la barraca, tras unas buenas tres horas de concierto, a bordo de un fantástico Cadillac solitario.