El Gobierno francés acepta ampliar la vía para las consultas populares
El Ejecutivo hace más cesiones a los ‘chalecos amarillos’ y pide el fin a los bloqueos
El Gobierno francés quiere dejar atrás, cuanto antes, la grave crisis de los chalecos amarillos, que ha mantenido en vilo al país desde hace un mes. Para ello, su estrategia es la del palo y la zanahoria: concesiones para atender la demanda de justicia social y de democracia directa –a través de más consultas populares–, pero exigencia de poner fin a las perturbaciones del tráfico que han causado ya 8 muertos e ingentes daños económicos.
En una entrevista con el diario económico Les Echos, el primer ministro, Édouard Philippe, aceptó abordar lo que se ha convertido, en los últimos días, en la principal reivindicación de los chalecos amarillos, la aceptación generalizada de los llamados referéndums de iniciativa ciudadana (RIC) para decidir asuntos políticos y sociales relevantes. Es una exigencia sin un contorno claro, pues cada cual la interpreta a su manera. Los referéndums ya están previstos en la Constitución de 1958. Los chalecos amarillos querrían que fuera más fácil proponerlos por iniciativa popular y que el recurso a ellos se convirtiera en habitual, como en Suiza.
“No veo cómo se puede estar contra este principio”, dijo Philip- pe. La petición se abordará en el gran debate nacional que quiere organizar Macron en los próximos tres meses, si bien el primer ministro puntualizó que las consultas populares no pueden hacerse para todo y deben darse ciertas condiciones. Los más duros de los chalecos amarillos querrían que la vía del referéndum suplantase al Parlamento, algo impensable para Macron y los principales partidos.
Philippe explicó asimismo que el aumento de 100 euros del salario mínimo afectará a 5 millones de hogares, 1,2 millones más de los previstos. Las modalidades de aplicación práctica de esta medida, anunciada la semana pasada por el presidente Emmanuel Macron, había causado muchas dudas, por la complejidad técnica.
Está claro que el Gobierno quiere aprovechar el momento, después de que pinchasen las manifestaciones del pasado sábado, para desactivar definitivamente la protesta, aunque probablemente quedarán núcleos irreductibles. Las concesiones son de envergadura. Lo que no lograron los sindicatos en su oposición a la reforma laboral, el año pasado, o los ferroviarios en la larga huelga de la primavera, lo han conseguido los chalecos amarillos con su ocupación de rotondas y peajes. A nadie se le escapa, además, que sin las repetidas escenas de guerrilla urbana, sábado tras sábado, en París y otras ciudades –con el desprestigio que ello supuso para la imagen de Francia y las pérdidas para los comercios– no habría habido tantas cesiones del Gobierno. Los propios chalecos amarillos reconocen, en privado, que los casseurs (los alborotadores violentos y saqueadores) les han hecho un eficaz trabajo sucio.
“Hemos cometido errores –admitió Philippe–. No hemos escuchado lo suficiente a los franceses. Sigo convencido que ellos quieren que transformemos el país. Yo les digo que su impaciencia es la mía”.
El ministro del Interior, Christophe Castaner, volvió a exhortar a los chalecos amarillos a abandonar las rotondas, peajes o accesos de autopistas que aún ocupan. “Ya basta”, alertó el ministro, quien recordó los 8 muertos habidos ya –en su mayoría por accidentes– desde el pasado 17 de noviembre y los perjuicios a la economía. “¿Conocen otro conflicto social de los últimos 30 años que haya causado tantas muertes? –se preguntó Castaner– Lo digo claramente: ¡Ya basta!”.
La compañía concesionaria de las autopistas, Vinci, ha anunciado que enviará la factura a los automovilistas que no pagaron porque hallaron las vallas de los peajes abiertas por los chalecos amarillos. No habrá recargo ni multa. Las videocámaras captaron las matrículas de los vehículos.
Algunos chalecos amarillos, entretanto, no resisten a la tentación del salto a la política, El cantante Francis Lalanne y otros activistas del movimiento anunciaron en Lyon la creación de una lista para las elecciones europeas de mayo próximo. También el Partido Comunista Francés (PCF) expresó su deseo de incorporar a chalecos amarillos en su lista. No obstante, la mayoría de activistas rechaza convertirse en políticos.
Un sector de los manifestantes anuncia una lista para las elecciones europeas del próximo mayo
La compañía concesionaria de las autopistas enviará la factura a quienes se saltaron los peajes