Los ‘nietos’ de Aulas
El presidente del OL se frota las manos con su nueva generación
En el decisivo partido de la Champions contra el Shakhtar, en Kíev (1-1), y el domingo frente al Mónaco (3-0), Bruno Génésio triunfó repitiendo la misma alineación. En el once sólo había un jugador por encima de la treintena: el central brasileño Marcelo. La media de edad del equipo era de 24,5 años. Del centro del campo hacia delante el mayor era Fekir, que en julio cumplió los 25. Se trata del único campeón del mundo que hay en la plantilla, que se perderá la ida del 19 de febrero por sanción.
El duelo de octavos de final contra el Barcelona será también un choque generacional, una disputa (aparentemente desigual) entre las promesas que no dejan de crecer en el Lyon y las estrellas del Barça. Sin ir más lejos, en el Ciutat de València, Valverde alineó desde el inicio a sus siete jugadores que ya tienen los 30.
Esos jóvenes futbolistas que empiezan a dar frutos –el equipo no estaba en octavos desde el 2013, cuando fue eliminado por el Apoel– son los de Jean-Michel Aulas (69). El presidente del club espera que le hagan vivir una segunda era dorada y que le sigan haciendo ganar mucho dinero.
La primera etapa victoriosa data de cuando el PSG aún no había recibido la inyección de petrodólares de Qatar. Entonces el Olympique de Lyon ganó siete ligas consecutivas, lo que llamó la atención de los grandes de Europa. Ahí fue donde Aulas se granjeó fama de duro negociador. Le sacó 38 millones al Chelsea por Essien (2005), 26 al Madrid por Diarra (2006), 15 al Barcelona por Abidal, 13 al Atlético por Tiago y otros 20 al Chelsea por Malouda (2007). En el 2009 con la venta de Benzema a Florentino Pérez, que pagó 35 millones, se dio carpetazo al ciclo victorioso.
Si ellos fueron sus primeros hijos, la actual plantilla son sus nietos. Entre medio de las dos generaciones, el club sólo ha podido ganar una Copa de Francia (2012), una de las pocas migajas que se ha dejado el todopoderoso PSG. Eso sí, Aulas ha seguido vendiendo y sacando buenos dividendos por los que le pedían abandonar el nido para volar por sí mismos y mejorar. Él, como buen tutor, accede previo paso por caja. Como sucedió con Samuel Umtiti, con el que llegó a un pacto de caballeros para traspasarlo al Barcelona antes de la Eurocopa del 2016 por 25 millones. Hasta el punto de que es raro el favorito a la Champions que no tenga un jugador con formación en Lyon. Pjanic se fue en el 2011 (por 11 millones al Roma), Lloris se marchó al Tottenham un año después (13 kilos), Lovren dejó 10 en el 2013 (Liverpool) o Mariano, cuyo retorno en agosto al Madrid ha costado 20. Eso sí, pocos veranos fueron tan fructíferos como el de 2017 en el que sacó casi 100 millones por las ventas de Tolisso (Bayern) y Lacazette (Arsenal).
Pese a la continua fuga de talentos, el Lyon ha vuelto a reunir un grupo interesante con una juventud insultante. Además del citado Fekir, el organizador Houssem Aouar, de apenas 20 años, es la joya de la corona. Los que le acompañan en la medular no son mucho más veteranos: NDombele, Tousart, Terrier y Mendy tienen un año más. Mientras que en ataque Traoré (23), Moussa Dembélé (22) y Cornet (22) son tres balas. Los holandeses Memphis Depay (24) y Tete (23) y el belga Denayer (23) completan el elenco.
Con esos mimbres se ha colado en octavos invicto, tras cinco empates y ganar al City en el Etihad (1-2), un partido que Génésio pone de ejemplo. “Ya pudimos ganar al City, un equipo que se parece bastante al Barcelona. Hay que apoyarse en esa victoria aunque creo que el Barça es más solido. Estando al 150% tendremos opciones”. La Champions es el mejor escaparate para los nietos de Aulas.
El único campeón del mundo de la plantilla, Nabil Fekir, se pierde la ida contra el Barça por sanción
Aouar, Tousart, Moussa Dembélé y Terrier están en la sub-21; NDombele ha dado el salto, como Mendy