NARBONA, UN MONUMENTO DE CIUDAD
Los expertos dicen que es el único buffet con categoría de alta gastronomía. No en vano, ha recibido el premio a la “mayor tabla de quesos del mundo”. ¿Quieres verla? Está en el restaurante Grands Buffets de Narbona. Pero es que todo en esta ciudad del sur de Francia es monumental. ¡No solo la gastronomía! Dos milenios de historia se muestran ante nuestros ojos. Descubre esta Ciudad de Arte y de Historia.
Así sería la completa jornada que te proponemos pasar en Narbona.
Narbona es una ciudad con un magnífico patrimonio histórico, una rica gastronomía y una vida cultural viva e inquieta. Es el destino ideal para una escapada de fin de semana, pero también para una estancia de vacaciones, donde podrás explorar la localidad en profundidad, pero también su maravilloso entorno. Incluso si solo tienes 24h, puedes pasar una jornada muy amena e interesante. Así que hemos preparado un plan de un día para descubrir la Narbona esencial.
9h Café en la plaza del ayuntamiento Con leche o solo, la mejor manera de empezar el tour es tomarse un café contemplando la majestuosa fachada del complejo medieval del Palacio-Museo de los Arzobispos. En el mismo centro de la plaza, además, puedes visitar las ruinas de la antigua Via Domitia, que recuerdan el peso de esta ciudad en el Imperio Romano. Una forma de iniciar el paseo bajo el influjo de la historia.
10h Pasear sin rumbo por el barrio medieval Cruzando el puente de Marchands (“de los Comerciantes”), uno de los dos puentes habitados en Francia, se encuentra el barrio de Bourg. Durante la Edad Media esta fue una zona extraordinariamente próspera gracias al comercio de textiles y vino. El barrio conserva su carácter medieval gracias a sus intrincadas callejuelas y sorprendentes fachadas, como la de Maison des Trois Nourrices (Casa de las Tres Nodrizas).
11h Parada en la catedral y en el palacio de los arzobispos La arquitectura medieval resulta excepcionalmente monumental en Narbona. Buena prueba de ello es el conjunto que forman el Palacio-Museo de los Arzobispos y la Catedral gótica de Sant-Just y Saint-Pasteur. Adéntrate en su interior y descubre hermosas colecciones de arqueología y arte, su claustro del siglo XIV o la sala del Tesoro de la catedral.
13h Avituallamiento en el mercado: productos locales y cata de vinos El mercado cubierto de les Halles es un templo consagrado a la gastronomía y el buen vivir típicamente francés, auténtico lugar de peregrinación para los gourmets. Bajo un pabellón de estilo Baltard (1901), descubre la increíble variedad de productos de esta tierra: ostras, miel, aceite de oliva y el vino. Abierto todo el año hasta las 14h, se puede disfrutar allí mismo de una agradable comida.
14h Digestión junto al agua Declarado Patrimonio Mundial de la Humanidad por la UNESCO, el canal de la Robine (rama lateral del Canal de Midi) invita a pasear por sus aguas en una de las típicas barcazas o bien por sus orillas, a pie o en bicicleta. Sin alejarte del canal, podrás contemplar los monumentos del centro de la ciudad: hermosos palacetes decimonónicos, la sorprendente maquinaria de las esclusas o plácidos espacios naturales a orillas del canal antes de desembocar en el Mediterráneo.
16h Compras en el centro o en el mercadillo de Navidad El centro de la ciudad lo compone un dinámico tejido de comerciantes y artesanos que ofrecen su saber hacer en un entorno arquitectónico histórico. Puedes comprar productos típicos de la región y, a menudo, aprovechar eventos comerciales que ofrecen atractivos descuentos. En esta época, además, resulta entrañable el mercado de Navidad que bien merece una visita.
18h Aperitivo y comida en el paseo de Barques Para terminar la jornada y recuperar fuerzas, relájate en las terrazas de coquetos cafés y restaurantes del paseo de Barques, mientras disfrutas de las actuaciones de artistas callejeros que participan en el festival Féeries de Noël. Es el momento, además, de seguir descubriendo todo lo que Narbona ofrece a los foodies: infinitas variedades de vinos de gran calidad y productos de la tierra artesanales. Todo ello en un ambiente alegre y bullicioso.