Paul Pogba
El francés, ninguneado por Mourinho, vuelve a liderar al United
FUTBOLISTA DEL MAN. UNITED
Paul Pogba (25) ya no podía soportar más a José Mourinho y la marcha del técnico portugués ha abierto una nueva perspectiva al futbolista francés. El Manchester United ha ganado dos partidos seguidos y Pogba brilla de nuevo.
Eran incompatibles y todos lo sabían. Y fue despedir a Mourinho y volver a salir a relucir el talento natural de Paul Pogba, el jugador de los red devils que más sufrió con los tejemanejes de Mourinho en el banquillo de Old Trafford. El internacional francés fue uno de los cuatro pesos pesados de la plantilla que amenazaron con pedir el traspaso en el mercado de invierno de continuar Mourinho al mando. El 18 de diciembre, tras el descalabro del Manchester ante el Liverpool en Anfield (3-1), los dueños norteamericanos del United pusieron fin al culebrón y el portugués fue cesado. Ese día comenzó la recuperación del United, que desde entonces ha encadenado dos victorias en la Premier: 1-5 al Cardiff y 3-1 al Huddersfield, esta última con dos goles del renacido Pogba, de nuevo manejando el timón del equipo.
Sin embargo, nada presagiaba que entrenador y jugador acabaran tan distanciados. Mourinho vio en el francés al jugador ideal para su nuevo proyecto y en el verano del 2016 consiguió que el United desembolsara los 120 millones que pedía el Juventus por el traspaso, el más caro de la historia entonces. Titular en la primera temporada, en la que el United ganó la Europa Liga, el centrocampista fue perdiendo peso en el equipo en la segunda, que se saldó sin títulos, y las hostilidades entre ellos fueron públicas ya al final de esta.
La tercera temporada, el pasado verano, no arregló las cosas, sino todo lo contrario. El jugador venía de ganar el Mundial y dejó bien claro antes de empezarla que le apetecía un cambio de aires. Así, lanzó distintos mensajes como globos sonda, entre ellos al Barcelona, dejándose querer.
Mou se lo hizo pagar con una dosis de banquillo y quitándole la vicecapitanía del equipo. “Hay cosas que no puedo decir porque si no sería sancionado”, comentó el francés en una rueda de prensa. “Si quieres irte, no hables con la prensa, pide el traspaso”, le replicó airado Mourinho.
A partir de ahí, todo fue cuesta abajo. Pobga se convirtió en un asiduo del banquillo de un United que, partido a partido, perdía comba en la Premier y se descolgaba de los puestos de Champions. Ahora mismo, sigue sexto, a ocho puntos de la cuarta plaza, que ostenta el Chelsea.
A comienzos de diciembre la situación entre la plantilla del United y Mou llegó a su punto crítico, de no retorno. Según la prensa inglesa, los pesos pesados amenazaron con amotinarse. Pogba utilizó las redes sociales para lanzar andanadas a la estrategia conservadora de su entrenador, al que reprochaba “una rigidez táctica que nos tiene encorsetados y nos impide movernos libremente”.
Los mismos medios se hicieron eco de la respuesta de Mourinho para defenderse: “No respetas a los jugadores y a los aficionados y matas la mentalidad de la gente buena y honesta que te rodea”.
El despido del luso fue una suerte de liberación, una catarsis colectiva. Al conocerse la noticia, Pogba colgó en Instagram una foto suya en la que se le veía medio sonreír con la leyenda Caption this. (Titula esto). Minutos después, la borró. Según The Sun sus palabras al vestuario sobre Mou no podían ser más duras:“Quería embaucarme y ponerme a la afición en contra. Ha jodido al futbolista equivocado”. A sus 25 años, Pogba tiene de nuevo vía libre para poder expresar su talento.
LAS CAUSAS DEL DESENCUENTRO El jugador se quejaba de las tácticas conservadoras de Mourinho y este le castigaba con el banquillo