Una periodista para los nuevos tiempos de la televisión
La nueva presidenta de la Academia de la Televisión tiene como prioridad abrir la institución de la era analógica a la digital
Lleva media vida trabajando en la radio y la televisión pública. Recién licenciada en periodismo por la Universitat Autònoma de Barcelona, María Casado (Barcelona, 1978) comenzó a trabajar en 1999 en los servicios informativos de Ràdio 4 de RNE como redactora. Casi dos décadas después acaba de ser elegi- da por sus compañeros de profesión como presidenta de la Academia de las Ciencias y las Artes de Televisión y justo hace diez días tomó posesión de su cargo y presentó su junta directiva.
“Quiero dar la cara por toda aquella gente que se dedica a la televisión”, afirmó tras acceder al cargo en el que sustituye a Manuel Campo Vidal, que lo ha ejercido durante doce años. “La decisión de hacer el paso fue muy meditada”, señala consciente de que deberá sacar tiempo de su vida personal cuando finalice su jornada laboral en La mañana de La 1 de TVE, programa que además verá ampliado su horario a partir de enero.
En esta nueva etapa, la periodista catalana quiere “ayudar y encontrar el punto de encuentro entre todos los profesionales de la televisión para hablar de las inquietudes y las preocupaciones de nuestra profesión”. Casado no es novata en la academia porque ya formó parte de la junta directiva de Campo Vidal. Alaba a su antecesor (“hizo muy buen trabajo”) pero considera llegado el momento “de abrir la institución a todos los profesionales que nos dedicamos al medio”. Y no sólo se refiere a las cadenas generalistas. También hay que “dar voz y voto” a la televisión que viene o que ya está aquí, como las plataformas de streaming .“Ahora mucha gente ve la televisión a través de teléfonos móviles y tabletas, y esto también es televisión”, destaca. Uno de los principales retos que se plantea Casado es precisamente que “la academia haga el paso de la televisión analógica a la digital”.
La periodista catalana quiere “escuchar el sentir de la profesión” e insiste en la idea de apertura de la institución para que se incorporen personas que hasta ahora o desconocían su existencia o no se sentían representadas debido, en parte, a esta gran transformación que está sufriendo la televisión. Es el caso de los grafistas, pone como ejemplo. “Hay muchas nuevas profesiones que existen en el medio, hay que abrirles las puertas de la academia y que tengan ganas de formar parte de ella”, afirma.
Se siente orgullosa de haberse convertido en la primera mujer en presidir la Academia de Televisión tras resultar elegida a principios de mes en unas elecciones en las que participó el 45,46% del censo de los miembros de la institución y en la que la periodista logró 178 votos a favor. Le gustaría, sin embargo, que al finalizar su mandato de cuatro años, “haya dejado de ser noticia que una mujer comience a tener cargos de responsabilidad en una institución o una empresa”.
Casado considera que “hay mucho talento” en la televisión española actual, tanto en programas informativos como de entretenimiento y de ficción. “Y muchas series han sido producidas por plataformas” como Movistar y Net- flix, afirma en esa constante voluntad de integrar los servicios de streaming. “La academia también tiene la obligación de poner en valor el talento que existe en la televisión española”, afirma.
La periodista es firme defensora de la radio y la televisión pública, en la que lleva trabajando cerca de 20 años. “Creo en su importancia como servicio público, y no hablo sólo de RTVE”, afirma. ¿Qué le ilusionaría que ocurriera en ese sector durante su mandato? “Me encantaría que de una vez por todas se lograse que los medios públicos dejaran
“Me encantaría que de una vez por todas se lograse que los medios públicos dejaran de ser un juguete político”
de ser un juguete político de unos y otros” y que se dejara trabajar a “los buenos profesionales” de esos medios. “Hay que alejarse de estos vaivenes políticos que tanto daño hacen, y ya no hablo sólo de los profesionales, sino de los ciudadanos que pagan estas radios y televisiones públicas”.
Uno de los temas en que ahora está trabajando “de una manera muy personal” la nueva presidenta de la academia es cuidar el lenguaje inclusivo así como la presencia de la mujer y la igualdad en televisión. También se muestra muy sensible a las diferentes culturas del país (en la nueva junta directiva hay representantes de TV3, Euskal Telebista y Canal Sur), así como también fomentar la colaboración con academias de Latinoamérica.