Benito García
PROPIETARIO DE BENITOSPORTS
Comerciante de vocación, Benito García pone en marcha la cuenta atrás para su relevo al frente de Benitosports, en enero del 2020. Su hija, Laura García, que lleva 8 años en la empresa, dirigirá la nueva etapa centrada en la digitalización.
Benito García (68) cogió las riendas del negocio familiar a finales de los setenta, con una sola tienda –Deportes Martín, en plaza Urquinaona– y el país en plena transformación. Y el próximo curso, a la vuelta de Navidad –“el 8 de enero del 2020”, asegura convencido–, pasará el testigo a su hija. Laura García, tercera generación al frente de la compañía, coge el testigo con una cadena de nueve tiendas (siete de la red Base Benitosports y dos franquicias de Adidas) todo el futuro online por delante. La compañía cumplió este 2018 su 75 aniversario.
Benito García Cano, futbolista del Barça en los 40, había abierto una tienda de material deportivo, Deportes Martín, junto a su colega del equipo azulgrana Mariano Martín en la avenida de la Luz de Barcelona. Era plena posguerra, cuando “no había de nada” y la industria de material deportivo se limitaba a un reducido grupo de marcas locales: las botas de fútbol Munich, los chándals Meyba, las mochilas Alpina y los balones Nitram, que distribuía Deportes Martín en toda España.
La buena relación de García y Martín con el mundo del deporte les abrió el camino en una época de carestía en la que hasta los deportistas de élite compraban personalmente su propia equipación. Mucho antes de la apertura que permitió la entrada de marcas internacionales al mercado español, a principios de los sesenta, Adidas acudió a Deportes Martín tras la pista de los balones Nitram. “El dueño de Adidas, Horst Dassler –hijo del fundador–, llamó a mi padre para localizar los talleres que fabricaban las pelotas”, explica Benito García. Ellos le remitieron a Favara de Matarranya, una pequeña localidad cerca de Caspe, en la que pronto apareció el flamante Mercedes del directivo alemán. En pocos años, Adidas lanzó su gama de balones de fútbol, los Telstar. La excelente relación con la marca alemana les valió durante décadas un descuento especial.
“A mi abuelo le tocó arrancar el negocio sin apenas recursos, a mi padre vivir la época del desarrollo y la explosión del negocio deportivo y yo tengo el reto de digitalizar el negocio, adaptándonos a los nuevos hábitos del consumidor y cambiar el lenguaje de la empresa”, resume Laura García (37), que se incorporó a la compañía en el 2010. Desde entonces, se ha encargado del área de marketing y de la modernización de la empresa, que además de las tiendas de material deportivo es distribuidor en exclusiva de equipaciones para más de 40 clubs en Catalunya y factura 10,5 millones de euros. Mercedes Delgar, esposa de Benito García, al frente del área de ventas, completa el triunvirato familiar de Benitosports, que tiene marca propia desde 1989.
En plena era digital y de invasión de los pure players, Benito García sigue siendo un defensor del comercio local . “Nosotros conocemos a los clientes y sabemos sus necesidades, eso no tiene que cambiar”, defiende. Durante sus años al frente del negocio, el sector ha dado un cambio radical, pasando de ser marginal y muy especializado a convertirse en una industria de masas en la que aproximadamente el 50% de los ingresos ya proceden del área de moda. “Nuestro mercado es el segmento alto, que busca material técnico y que requiere un servicio exquisito”, asegura García padre.
Con estas premisas, su hija Laura García busca también llegar al nuevo consumidor. La nueva tienda de Benitosports en Glòries, prevista para el 2019, será el piloto para testar las nuevas opciones que brinda la digitalización, desde el big data a las pantallas y zona de fútbol infantil, así como introducir internet en el punto de venta. “Es un cambio cultural, porque todo el stock pasará a ser digital”
Aunque deje la dirección de la compañía, García prevé seguir gestionando las relaciones con los clubs deportivos, además de continuar su larga carrera como activista comercial –forma parte de la junta de Comertia–. “El sector se tiene que profesionalizar. Cuando yo empecé, se podía crecer y dejar un negocio saneado a los hijos; hoy no son muchos los que lo consiguen”, resume.
Laura García, nieta del fundador, asumirá la dirección a principios del 2020 con el reto digital