Crac en China entre señales de preocupación
La guerra comercial y la desaceleración global tiene un perdedor con mayúsculas: China. Las bolsas del gigante asiático sufrieron en el 2018 las mayores pérdidas de entre los principales mercados financieros del mundo. El índice Shenzhen cayó un 34%, mientras el selectivo de Shanghai lo hacía un 25% y el China A50 retrocedía un 21%.
En este caso, las dudas de los inversores sí que están muy relacionadas con la realidad de la economía del país, como se comprobó con el indicador conocido el pasado 31 de diciembre. El índice general de compras –o PMI, por sus siglas en inglés– de China registró en el último mes del año su primera contracción desde julio del 2016, al situarse en los 49,4 puntos, según datos publicados por la Oficina Nacional de Estadísticas (ONE), informa Efe. Este dato es, asimismo, el más baja desde febrero del 2016, cuando el PMI cayó hasta los 49 puntos. Por encima del umbral de los 50 puntos, el indicador avanza un crecimiento futuro de la actividad y por debajo, una contracción. En este caso, de producirse, sería muy leve, aunque también es relevante que el PMI retrocede por cuarto mes consecutivo después de haberse mantenido justo en el umbral de la contracción en noviembre. Según el diario hongkonés South China Morning Post, los analistas esperaban que el PMI se situase en diciembre en el mismo nivel que el mes anterior. De hecho, esto contrasta con el buen momento del sector a mediados del 2018, ya que registró su máximo crecimiento del último lustro el pasado mes de mayo, cuando el indicador alcanzó los 51,9 puntos. En diciembre, el subíndice de producción bajó de 51,9 a 50,8, mientras que el de nuevos pedidos se redujo desde 50,4 a los 49,7 puntos.