El sacerdote de Constantí reiteró los abusos a los niños en las excursiones
“He querido poner sobre la mesa un hecho que existe, para que abramos los ojos, escuchemos a los niños y se actúe; con esto me doy por satisfecho. No quiero nada más, ni notoriedad, ni protagonismo ni indemnizaciones”, asegura Joan Maria Ramon. Hace casi cincuenta años, cuando él tenía diez y era monaguillo en la parroquia de Constantí, el sacerdote Pere Llagostera, organizó unas colonias de verano y abusó de él y de más niños a quienes realizaba tocamientos por las noches. “El siguiente verano, fue todavía peor, éramos una docena y sólo tres no fueron víctimas”, asegura.
El relato de Joan Maria Ramon ha impactado en Constantí. El religioso murió hace dos años y ayer en esta localidad de Tarragona muchos aseguraban que era “un secreto a voces” el comportamiento y los abusos del sacerdote. Pero hasta ahora reinó el silencio. Joan Reig, vecino de la localidad, amigo de Joan Maria Ramon y batería de Els Pets, se ha sumado a la denuncia pública. Precisamente, en una de las canciones del último disco del grupo, Corvus, relata lo que sucedía por las noches en aquellas colonias que organizaba Llagostera en los Pirineos: “Dónde estaba tu Dios cuando mi piel tocabas, y donde estaba el mío cuando yo espantado callaba”.
El documental sobre abusos sexuales en la iglesia de Albert Solé, “me hizo despertar; vi la reacción de algunas de las víctimas que habían quedado bastante traumatizadas y decidí aportar mi testimonio por si podía ayudar a otros”, añade Joan Maria Ramon. El Periódico publicó ayer su caso.
“Fue en 1972 y 1973 y la segunda vez se magnificó; muchos dejaron la escolanía; las familias lo sabían pero en aquella época se bajaba la cabeza y no se denunciaba, se pasaba en silencio”, explica Joan Maria Ramon, quien asegura que, más allá de las colonias, hubo otros menores víctimas del sacerdote. “Pero otros prefieren permanecer en el anonimato y lo respeto”, afirma y añade que no confía “en que esto se arregle sólo con pedir perdón y rezar, hay mucha opacidad y mientras la iglesia lo considere un asunto interno, no le veo una salida”.
El arzobispado de Tarragona publicó un comunicado en el que reitera su compromiso en garantizar la protección de menores, asegura que no consta ninguna denuncia ni indicio contra el mosén y lamenta “profundamente el sufrimiento de las víctimas y nos ponemos a su disposición para escucharlos”. El sacerdote, fallecido a los 86 años, fue rector de Constantí durante 27 años (de 1972 hasta 1999) y luego rector de la Santísima Trinitat de Tarragona hasta el 2007, cuando se jubiló.
Los abusos denunciados en Constantí se suman a la lista de casos que van saliendo a la luz pública. Ayer, la comisión diocesana del obispado de Girona empezó a investigar los presuntos abusos que durante tres décadas habría cometido monseñor Tomàs Pons, quien fue 33 años párroco de Vilobí d’Onyar y 29 años del colegio Bell-lloc de Girona, de niños. Según la Agencia Efe, la comisión, integrada por un cura, su asistente y una psicóloga empezará hoy a entrevistar a los denunciantes y está previsto que Tomàs Pons, de 91 años, declare al final. Las conclusiones se mandarán a la Santa Sede para que decida qué medidas hay que tomar.
En Bizkaia, la Fiscalía ha interpuesto una querella contra un presbítero por “comportamientos inadecuados contra la libertad sexual” durante actividades de educación en el tiempo libre y será un juzgado de Gernika el que instruya el caso. Una asociación scout informó al obispo de Bilbao a finales de noviembre, al día siguiente se apartó de forma cautelar al presbítero y se abrió una investigación interna, que envió su escrito a la Fiscalía el miércoles pasado.
INVESTIGACIÓN
El obispado de Girona inicia las entrevistas a los denunciantes del párroco de Vilobí
EN EL JUZGADO
En Bizkaia, la Fiscalía se querella contra un presbítero tras recibir un informe eclesiástico