La Vanguardia

Detenido un chico de 16 años en Sant Cugat por violar a otra menor

- M. NAVARRO

La presunta violación múltiple sufrida por una joven de Sabadell la madrugada del domingo pasado no fue la única agresión sexual denunciada el pasado fin de semana en Catalunya. Los Mossos d’Esquadra detuvieron ayer a un menor de edad, de 16 años, acusado de la agresión sexual denunciada por una menor de la misma edad en las Carpas Lemon Air de Sant Cugat del Vallès.

Es la segunda agresión sexual denunciada en Sant Cugat y en esa zona de ocio en lo que llevamos de año. En las dos ocasiones, o bien testigos, o el personal de seguridad de las carpas, logró retener a los agresores sexuales, hasta la llegada de la policía.

La joven apareció desnuda en las afueras de la discoteca, donde fue auxiliada por unas personas que alertaron al personal de seguridad y retuvieron al agresor. La anterior agresión sexual se produjo en el interior del local. Y también fueron clientes, con la colaboraci­ón del personal de seguridad, los que retuvieron a los agresores.

También el fin de semana, en Sant Celoni, una mujer denunció que se encontraba en Llinars del Vallès, en la vía pública, sobre las seis de la mañana, cuando se detuvo a su lado un vehículo con tres personas en su interior. Uno de los hombres salió del coche y la retuvo sobre un banco en el que le realizó tocamiento­s mientras le gritaba que la iba a violar. La mujer logró zafarse de su agresor y correr hasta su domicilio. Después, acompañada de sus padres, fue atendida en el hospital de Sant Celoni y más tarde en el de Granollers por lesiones en las cervicales. La víctima aseguró que no conocía de nada a su agresor. Finalmente, los Mossos tramitaron esta última denuncia por un delito de lesiones y de amenazas.

Las presuntas agresiones de Sabadell y de Sant Cugat ponen en valor el protocolo recién aprobado por el Departamen­to d’Interior de la Generalita­t, que pretende, precisamen­te, combatir los abusos y agresiones sexuales en los locales de ocio. Ese nuevo protocolo y el cambio legislativ­o dotará al personal de seguridad de mejor formación y la posibilida­d sancionar con multas de hasta 3.000 euros a las personas que acosen a mujeres en un bar.

Justo esto es lo que le asegura que le ocurrió a la víctima de Sabadell. La mujer contó que durante el último tramo de la noche, en el bar en el que se encontraba con sus amigos, un magrebí se le acercó en varias ocasiones y la acosó.

En cuanto entren en vigor el nuevo reglamento y la ley, cualquier mujer podrá acudir al personal de seguridad, poner en conocimien­to de estos el acoso que dice estar sufriendo, y el hombre puede no sólo ser expulsado del local, sino que también se le puede multar administra­tivamente.

En esta ocasión, el hombre siguió a la mujer hasta el momento en que comprobó que se quedaba sola y la abordó en mitad de la calle, hasta arrastrarl­a, por la fuerza, a la nave abandonada en la que presuntame­nte fue violada por al menos tres hombres.

Se trata del segundo ataque sexual en la misma zona de ocio de la ciudad en lo que va de año

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