La industria catalana cambia de tendencia y cae un 1,5% en el 2018
El sector industrial en Catalunya, que durante la recuperación ha jugado un papel de tractor de la economía, registró un cambio de tendencia en el cuarto trimestre del año pasado cuando se contrajo un 1,5% en terminos interanuales. Es el primer descenso desde que arrancó la recuperación y va en linea con las cifras registradas en el conjunto del Estado, donde cayó el 1,1%. El Departament d’Economia de la Generalitat culpa a la desaceleración del comercio internacional y recuerda que el descenso de la industria es “generalizado en el conjunto de las economías europeas”.
El retroceso de la industria se produce al mismo tiempo que la economía catalana sufre una desaceleración al crecer su PIB en el conjunto del año un 2,6%. Pese a la moderación es un crecimiento superior en una décima del que se dio en el conjunto de España: un 2,5%.
Ese comportamiento relativo positivo de la economía catalana puede cambiar en los próximos meses. Si se analizan las cifras del tercer y cuarto trimestre de forma aislada se aprecia cómo Catalunya creció una décima por debajo de España en esos dos periodos.
La ralentización del PIB de Catalunya es más evidente cuando se compara con la evolución de los tres ejercicios anteriores cuando la economía aumentó entre el 3,4% y el 3,8%. Economia culpó de la moderación del crecimiento a “la desaceleración del comercio mundial, la incertidumbre del contexto global y el debilitamiento progresivo del impulso monetario del BCE”.
En relación con la contracción del PIB industrial, el catedrático de Economía Aplicada de la UAB Josep Oliver opinó que se debe “al comportamiento de las exportaciones, que ha sido menos positivo y a la peor evolución de la producción industrial”. Oliver añadió que “se aprecia también un agotamiento en el margen de maniobra de mejora en la industria derivado de la reforma laboral”.