Casado sube aún más el tono de sus ataques al presidente del Gobierno
El PP equipara la agenda independentista a ETA y aboga por derogar la ley del aborto
Si el miércoles Pablo Casado se deshizo en insultos contra Pedro Sánchez al anunciar la manifestación “por la unidad de España” de este domingo, el líder del PP siguió ayer en el mismo tono, incluso más duro. Según Casado, “la agenda que estamos viendo en Catalunya es la agenda de ETA”.
“La agenda que estamos viendo en Catalunya es la agenda de ETA. Es decir, la agenda del nacionalismo que se alía con la izquierda acomplejada y apaciguada. Es la gran falacia de la izquierda nacional, el intentar ver la transición como un pacto que se cerró en falso. Siento ser tan vehemente, pero lo que estamos viviendo es lo más grave que yo recuerdo en política y es algo que como líder de la oposición no voy a tolerar”.
Esta frase de Pablo Casado, en una entrevista concedida a Efe, causó gran sorpresa. Pero horas después la repetía, con algún matiz, en otra entrevista, esta vez en el programa de Federico Jiménez Losantos en EsRadio. Refiriéndose a la política de Sánchez sobre Catalunya dijo: “Esto, al final, es la agenda batasuna” y “el único recurso que les queda a los españoles de bien es mostrar su indignación en la calle”.
En el fondo, sin explicarlo, Casado repite la tesis que ha mantenido el histórico dirigente vasco del PP Jaime Mayor Oreja –que fue ministro del Interior con José María Aznar–, que siempre ha vinculado lo que pretenden los independentistas catalanes con lo que pretendía ETA.
Todavía en mayo pasado, Mayor Oreja lo explicaba. A su juicio, “ETA ya no necesita matar porque ya está en política” y su “proyecto de ruptura está más desarrollado que nunca en Catalunya”. Ese proyecto, según el exministro, “es más fuerte que antes” y se traduce, hoy en día, en debates sobre autodeterminación de los pueblos, la legalización de los referéndums, la flaqueza de los partidos constitucionalistas, justamente los términos en que se mueve el proceso independentista en Catalunya. A su juicio, la negociación con ETA vino a ser un “tú dejas de matar, y yo, gobierno socialista, transformo España”, y “algún día podrán alcanzar el poder a través de tu proyecto”.
Casado utilizó ayer ese argumento para justificar la escalada de sus improperios contra Sánchez y la convocatoria para este domingo, junto a Ciudadanos y Vox, de la concentración en la plaza Colón de Madrid, para expresar el rechazo al presidente del Gobierno, tras el anuncio de la figura del relator en la mesa de diálogo de partidos catalanes, y pedir elecciones generales.
Ese es, de hecho, el lema de la cita. Sin las siglas de ninguno de los partidos que han convocado o se han sumado a la concentración y con la imagen de la gran bandera de España que ondea en la plaza de Colón, en el cartel se puede leer: “Por una España unida”. Y, resaltado con los colores rojo y gualda, “¡Elecciones ya!”. El lema es producto de las negociaciones entre PP y Cs, que continúan hoy para decidir quién hablará en la concentración, y cerrar todos los detalles.
En la protesta contra Sánchez no estarán presentes los principales barones del PP (Alberto Núñez Feijóo, de Galicia; Juan Manuel Moreno, de Andalucía, y Alfonso Alonso, del País Vasco), los tres con justificación: Feijóo llega el mismo domingo de Estados Unidos, donde se encuentra en viaje oficial; Moreno, por un compromiso familiar ineludible, y Alonso, porque tenía comprometida su presencia en el acto de homenaje a Joseba Pagazaurtundua en el aniversario de su asesinato por ETA.
Pero las tres comunidades, como el resto de las organizaciones territoriales del PP, están comprometidas con la convocatoria, tendrán representantes de alto nivel y aportarán muchos autobuses, que trasladarán a los ciudadanos que lo deseen desde todas las partes de España hasta Madrid
para “protestar contra las cesiones” de Sánchez, como dijo ayer Casado. Un Sánchez que, insistió, “está traicionando a la Constitución y a la jefatura del Estado”.
Para Casado, el presidente del Gobierno “quiere cambiar la historia” de España y está “poniendo en riesgo su futuro”.
Por eso el objetivo de los convocantes es “echar a Sánchez”, lo que requiere que se celebren elecciones. Aunque no descarta del todo una moción de censura, como no tiene votos, el líder popular prefiere que la censura se la haga la gente en la calle, en la manifestación del domingo. Una protesta que plantea como “una moción de censura en la calle”.
Y a ella quiere sumar a otros partidos del arco parlamentario y de organizaciones cívicas. Sin embargo, formaciones como Coalición Canaria, pese a ser muy crítica con el Gobierno, no acudirá a la concentración. Entre las organizaciones, algunas que representan a víctimas del terrorismo y Hazte Oír, sí estarán presentes.
Las descalificaciones de Casado a Sánchez, que ayer repitió en sus encuentros públicos, han animado a los grupos más reaccionarios. Casado insistió en sus palabras del día anterior: “Llamar a los españoles a la calle es la única fórmula que nos queda para que un presidente del Gobierno mentiroso y felón actúe en beneficio del mandado constitucional con el que juró su cargo”. También repitió las acusaciones de “alta traición” que hizo el miércoles, porque considera que “estamos ante una actuación de felonía, de alta traición a España, que no se ha visto desde el 23-F”.