El terrorista del Museo Judío belga fue carcelero del Estado Islámico
Dos periodistas franceses que fueron secuestrados por el Estado Islámico en Siria han reconocido a uno de sus carceleros en la persona de Mehdi Nemmouche durante el juicio que se sigue en Bruselas contra este ciudadano francés no por el secuestro sino por la muerte de cuatro personas en el ataque terrorista contra el Museo Judío de la capital belga el 24 de mayo del 2014.
“No tengo ninguna duda en absoluto sobre el hecho de que Mehdi Nemmouche, aquí presente, fue mi carcelero y torturador en Siria con el nombre de Abu Omar”, dijo Nicolas Hénin, de 43 años, que ha dejado el reporterismo. Con él se encontraba en la sala del juicio Didier François, de 58 años, quien también reconoció al acusado. Otros dos periodistas pertenecientes al mismo grupo de secuestrados no acudieron.
Nemmouche, según France Presse, miraba a los periodistas y sonrió en varias ocasiones. Su abogado rechazó los testimonios como “un proceso dentro del proceso”, ya que la causa no tiene que ver con los periodistas. Pero sí la que le acusa, en otro proceso, de haber sido carcelero del Estado Islámico...
Es interesante el hecho de que los reporteros permanecieron cautivos entre mediados de junio del 2013 y el 18 de abril del 2014, cuando un grupo de catorce extranjeros fue liberado, y el ataque del museo se produjo un mes después. Es decir, que Nemmouche viajó de Siria a Bélgica para atentar. No fue el único: Nicolas Hénin aseguró también haber reconocido a otro de sus carceleros: Najim Laachraoui, a quien conocía como Abu Idris. Este hombre fue uno de los autores de la matanza de 130 personas en París el 13 de noviembre del 2015, y el 22 de marzo del 2016 se haría estallar en el aeropuerto de Bruselas. Nemmouche fue capturado en Marsella poco después del ataque al museo y entregado a Bélgica.
Nemmouche viajó a Siria en enero del 2013 y lo hizo probablemente influido por el ejemplo de Mohamed Merah, según el abogado de las organizaciones judías que ejercen la acusación particular. En el 2012, Merah asesinó a siete personas, tres militares y un padre judío con sus tres hijos en Montauban y Toulouse. Al año siguiente, y ante sus prisioneros en Siria, Nemmouche evocaba con “admiración” los crímenes de Merah.
Calificado por los testigos de “mala gente” y de “sádico y narcisista”, Mehdi Nemmouche, hoy de 33 años, era un delincuente polirreincidente que se radicalizó, al igual que otros, en prisión.