La Vanguardia

El Valencia saca petróleo

El Betis dilapida los goles de Loren y Joaquín, que anotó desde el córner

- ADOLFO S. RUIZ

El Betis y el Valencia dejaron para la vuelta en Mestalla la resolución de una semifinal muy disputada, que los andaluces tuvieron muy a su favor al inicio de la segunda mitad, pero que los valenciani­stas lograron mantener con vida con un empate en el descuento (2-2). El excelente juego de Canales, sobre todo en la primera mitad, y un gol olímpico de Joaquín al inicio de la segunda daban una importante ventaja al Betis, pero Cheryshev acortó distancias y Gameiro, cuya entrada resultó decisiva, pusieron las tablas en el marcador. Ambos equipos llegaban a estas semifinale­s de la Copa con el plus de moral que habían conquistad­o el pasado fin de semana gracias a sus buenos resultados ante el Barça y el Atlético. Nunca en su historia había llegado el Betis a estar tan cerca de una final y, al mismo tiempo, seguir vivo en Europa. La ilusión se había desbordado en una parte de Sevilla, donde más de 57.000 béticos apoyaron en la mejor entrada del Villamarín.

Consciente­s de que se trata de una eliminator­ia de al menos 180 minutos, el Betis y el Valencia se lo tomaron con calma al principio. Los verdiblanc­os trataban de asimilar la lesión de Bartra, que tuvo que dejar el terreno de juego a los diez minutos, mientras al Valencia le bastaba con la seguridad táctica de su 4-4-2, con las líneas bien juntas, para intentar proyectars­e al contraataq­ue con Parejo como faro y guía y Rodrigo como punta de lanza. Por el contrario, Santi Mina y Cheryshev apenas aportaban nada.

Hacia la mitad del primer tiempo el equipo de Marcelino empezó a encontrar vías de penetració­n, mientras el Betis seguía atascado. Surgió entonces la figura del guardameta de la Copa, Joel Robles, que mantuvo en pie a su equipo con dos grandes paradas. Junto al guardameta, Sergio Canales volvió a demostrar que, hoy por hoy, es uno de los mejores medios españoles.

De las botas del cántabro surgieron las mejores oportunida­des de los andaluces, los centros más precisos, las galopadas más vertiginos­as. Canales combina su calidad técnica, con una gran visión del juego y una potencia creciente, tanto en el disparo como en el aguante físico. De un centro suyo, tras un saque de esquina botado en corto, salió en el último minuto de la primera mitad un balón al segundo palo que Sidnei devolvió al centro del área para que lo rematara Loren al fondo de las mallas.

Este gol tardío movilizó al Valencia al inicio de la segunda mitad hasta que Joaquín se sacó de la chistera un gol olímpico, que nadie apreció en primera instancia, pero sí el VAR, que dio validez al tanto.

Desde ese momento, el partido se convirtió en un auténtico toma y daca donde ambos equipos tuvieron buenas oportunida­des, especialme­nte un disparo de Cheryshev al larguero en el minuto 89. Fue el preludio de un nuevo contraataq­ue valenciani­sta en el que esta vez sí Gameiro acertó con la portería y puso unas tablas en el marcador que conceden a los de Marcelino García Toral una importante ventaja para el partido de vuelta en Mestalla.

 ?? AITOR ALCALDE / GETTY ?? Dos sonrientes Canales y Joaquín celebran el gol olímpico, desde el córner, que marcó el segundo
AITOR ALCALDE / GETTY Dos sonrientes Canales y Joaquín celebran el gol olímpico, desde el córner, que marcó el segundo

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