Barcelona recibió a 2.900 venezolanos en el 2018
El 45% de los migrantes atendidos por el Saier se encontraban en situación administrativa irregular
El Servei d’Atenció a Immigrants, Emigrants i Refugiats de Barcelona (Saier) prestó ayuda durante el 2018 a 19.422 personas –casi 2.500 más que en el 2017–, de las cuales 7.433, el 38%, manifestaron su interés por iniciar la tramitación del asilo. Y Venezuela volvió a ser el primer país emisor de migrantes a Barcelona, un mínimo de 2.844, cifra que engloba a los que pidieron ayuda en el Saier, pero no a todos los que llegaron a Barcelona el año pasado, según el informe presentado ayer por el teniente de alcalde de Derechos de la Ciudadanía, Jaume Asens.
De dichos 2.884 migrantes venezolanos cerca de 1.900 habrían presentado la demanda de protección internacional. De hecho, en el conjunto de España, la primera nacionalidad solicitante de asilo es la venezolana. A la espera de cerrar los datos del 2018, en el 2017 España registró cerca de 32.000 peticiones de refugio, de las cuales 10.627 fueron tramitadas por venezolanos, seguidos de sirios y colombianos.
A finales del año pasado, la Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) informaron de que la cifra de refugiados e inmigrantes de Venezuela en todo el mundo había alcanzado los tres millones, la mayoría de los cuales se habían desplazado a Colombia, Perú y Ecuador huyendo de la violencia y de la falta de los productos más básicos en su país. Sólo los que tienen recursos pueden pagarse un pasaje de avión rumbo a Europa.
Colombia ocupa el segundo lugar en la lista del Saier. Más de 2.000 personas recurrieron a este servicio, casi el doble que el año anterior. Y 1.018, más del triple que en el 2017, plantearon la solicitud de asilo.
El 45% de los migrantes que pasaron por el Saier se encontraba en situación administrativa irregular, mientras que el 26% estaba tramitando la documentación. Asens reiteró la necesidad de “modificar la ley de Extranjería para flexibilizar los permisos de trabajo”; de lo contrario, “están condenados a recurrir a la economía sumergida, lo que genera
El presupuesto del Saier ha aumentado en un 121% en tres años y el personal ha pasado de 50 a 70 trabajadores
disfunciones en la ciudad y en el conjunto del país”. El teniente de alcalde consideró que esta debería ser una medida prioritaria para “parar los pies a la extrema derecha, que si ha crecido en Andalucía es por la imagen de desbordamiento que se dio el pasado verano en sus costas, una imagen que se amplificó por la falta de planificación y de atención a los migrantes”.
Una vez más, Asens reclamó a Pedro Sánchez que concrete la suma que recibirá Barcelona a cargo del Fondo para la Integración, Acogida y Refuerzo Educativo de los Inmigrantes, unos recursos que suprimió el PP en el 2012 y que el Gobierno socialista anunció que recuperaba. Los ayuntamientos, y en concreto el de Barcelona, se quejan de que deben llegar donde no llega el Gobierno de Madrid en la acogida de refugiados, siendo la atención de este colectivo una competencia estatal.
Para afrontar las necesidades de los migrantes, el presupuesto del Saier se situó en 3,7 millones de euros en el 2018, un 121% más que tres años antes. Asimismo, la plantilla ha pasado de 50 a 70 trabajadores y se están ampliando las instalaciones.
Otro dato relevante es que en sólo dos años se ha quintuplicado el número de menores a los que se ha prestado ayuda. Todos han viajado a Barcelona acompañados por sus familias.