El juicio del siglo

Siento una enorme pena viendo a exconsellers o a la expresidenta de mi Parlament en un banquillo de acusados. Estoy seguro de que la inmensa mayoría de los catalanes sentimos lo mismo. Pero no comparto que sea una humillación. Todas y cada una de estas personas fueron avisadas en repetidas ocasiones del error jurídico (ya lo tipificarán si es el caso quienes para ello ejercen y cobran) que cometían, y siguieron por ese camino.

Creo que es un error que los abogados que estáis trabajando para defender a vuestros clientes mezcléis la política. ¿No sería mejor batir el cobre en todas y cada una de las líneas para desarmar los argumentos de Fiscalía, acusación... tratando de demostrar, por ejemplo, la ausencia de violencia? No es tan difícil hacer esa separación. Nadie os pide (espero) que para defender tengáis que echar por tierra un sistema que, os guste o no, es el que un Estado se ha concedido y os permite vestiros la toga que lleváis puesta.

La tentación de inundar con el tufo tóxico de la política un juicio

abierto en canal a toda la audiencia televisiva es demasiado irresistible para algunos. No para vosotros. Pero dejad que los políticos sigan su camino.

Ningún tribunal europeo pondrá en tela de juicio el sistema español. Y si algún recurso llega a instancia superior, este no se dilucidará por esos argumentos. ¡Suerte, colegas!

CARLOS FONTES

Barcelona