El Macba revisa a Marclay, Takis y Posenenske
La temporada abordará también el poscolonialismo
The Clock es posiblemente la obra de arte contemporáneo más célebre de las últimas décadas, cuyo magnetismo traspasa el siempre estrecho círculo de los entendidos. Una película de 24 horas de duración hecha con miles de clips de películas, cuya proyección en los principales museos del mundo, del MoMA a la Tate, convoca colas en un fenómeno sin precedentes. Su autor es el suizo-americano Christian Marclay, protagonista de una próxima monográfica en el Macba que, sin embargo, no incluirá The Clock por expreso deseo del artista, para quien es condición innegociable que la obra se presente en solitario y no en el contexto de otras producciones suyas.
Con todo, Composiciones, que así se titula la exposición que reunirá algunas de sus videoinstalaciones e instalaciones inmersivas más recientes (Video Quartet, Surround Sound...) junto a piezas más tempranas, es una de las principales apuestas del museo barcelonés para este 2019, en el que también ofrecerá sendas miradas retrospectivas de Charlotte Posenenske, artista alemana cuya obra se mueve entre el minimalismo y el conceptualismo (octubre) y el griego Takis, pionero en la creación de nuevas formas artísticas utilizando la energía magnética, la luz y el sonido (noviembre), además de una visión colectiva desde el arte en torno al mundo poscolonial y sus heridas (mayo).
El Macba, que cuenta con un presupuesto ligeramente superior al del pasado año (11 millones de euros), ancla su programación en torno a una serie de líneas de trabajo que, según su director Ferran Barenblit, tienen que ver con “una lectura no hegemónica del mundo del arte, la recuperación de narrativas que han quedado olvidadas, la participación del arte en procesos que implican una progresión social y la relación del arte con la cultura popular”. Para próximos años están ya en marcha sendas muestras de Fina Miralles y Gego, artista esta última a quien el propio Macba dedicó una gran antológica en el 2006, además de una revisión del arte de acción en los años 90 en España.
Además, en el marco de la presentación de su colección permanente, Un siglo breve, se incorporarán obras de Antoni Muntadas (On Subjectivity), Roberto Obregón Niágara y Marcos Ávila Forer. Y, de puertas afuera, están de gira las muestras de Domènec (Filipinas) y en el futuro lo harán las de Melanie Smith (Ciudad de México), Plensa (Moscú y Azerbaiyán) y Brossa (Buenos Aires).
Otra de las novedades del museo será la inauguración, en verano, de la cafetería, cuyas obras ya han comenzado.
El museo, que abrirá este verano una cafetería, cuenta con un presupuesto de once millones de euros