El gobierno municipal asegura que se está cumpliendo el plan de barrios
El plan de barrios se está ejecutando a buen ritmo, según el gobierno municipal. En respuesta al PSC, que asegura que tan sólo se ha ejecutado el 6% –exactamente el 5,96%– de las inversiones totales previstas (véase La Vanguardia de ayer), la teniente de alcalde Janet Sanz sostiene que el nivel de ejecución asciende al 60%, según explicó ayer en el pleno del Ayuntamiento. “Se le ha caído un cero”, le dijo al concejal socialista Jaume Collboni, al que acusó de no conocer lo que pasa en los barrios.
Las explicaciones de Sanz no evitaron la reprobación del equipo de la alcaldesa Ada Colau por su gestión del plan de barrios planteada por los socialistas. La medida salió adelante, con el apoyo, además del PSC, de PDECat, Cs, ERC y PP. BComú y la CUP votaron en contra y el edil no adscrito Joan Josep Puigcorbé se abstuvo.
El programa, que se debe desarrollar entre el 2017 y el 2020 con más de 500 medidas con una inversión de 150 millones de euros, se está cumpliendo, según la teniente de alcalde. “En el 2017 y el 2018 se ha puesto en marcha el cien por cien de las actuaciones previstas y programadas”, aseguró. Y añadió que, en global, se ha alcanzado “el 60% de ejecución de todo lo que se ha trabajado con los vecinos y vecinas”. Sanz recordó que el objetivo del plan es “disminuir la brecha entre los barrios” y, en este sentido, subrayó que, “por primera vez desde el año 2000, la desigualdad deja de crecer y comienza a revertirse ligeramente”.
Collboni denunció los “incumplimientos, incompetencia y engaños” del gobierno de la ciudad en este asunto, defendió las cifras presentadas por su grupo y anunció que pedirá un pleno extraordinario para denunciar que el programa no ha cumplido las expectativas ni de mejora de calidad de vida ni de regeneración urbana. “Los barrios se han sentido abandonados por Colau”, manifestó el jefe de filas socialista.
Jordi Martí (PDECat) consideró “nula o deficiente” la gestión del plan por parte del gobierno municipal”. Koldo Blanco (Cs) lo tildó de “plan de marketing político” de Colau. Por suparte, Jordi Coronas (ERC) rebajó la cifra de ejecución al 5,92% y denunció que, pese a este bajo nivel, “ha habido desviaciones importantes”. El popular Alberto Fernández formuló uno de sus habituales juegos de palabras: “Una de las medidas estrella de la señora Colau va a ser una de las medidas estrelladas”, dijo. Sólo la CUP rechazó la reprobación. Pese a ello, lamentó, entre otros aspectos, que el plan “no está cortando el proceso de expulsión de vecinos”, según explicó su edil Pere Casas.