La eurozona ofrecerá inversiones a cambio de reformas
Dinero para reformas. Un presupuesto de la zona euro concebido para recompensar la aplicación de reformas estructurales. Esta es la idea que subyace bajo la propuesta conjunta de Francia y Alemania que detalla su plan para la creación de un presupuesto centrado exclusivamente en la zona euro. “El objetivo del instrumento presupuestario de la eurozona será aumentar la competitividad y la convergencia de la zona euro”, dice el documento citado por Reuters, y que servirá de base de negociaciones para el eurogrupo.
En la propuesta hay elementos diseñados para seguir las directrices del Consejo Europeo de diciembre y para intentar suavizar la previsible oposición de países como Holanda, que frenan cualquier operación que entiendan que pueda derivar en una transferencia de fondos a los países del sur. En concreto, tres características son destacables. La primera, el condicionamiento. El presupuesto de la eurozona servirá para apoyar las reformas que sean identificadas en el semestre europeo, es decir en las propuestas que realiza la Comisión para cada estado miembro, lo que significa que será desde
Alemania y Francia acuerdan una propuesta conjunta para el próximo presupuesto
Bruselas donde se marcará dónde deben invertirse estos fondos, y sólo se desembolsarán a cambio de resultados en la aplicación de estas reformas.
En segundo lugar, y tal como decidieron los jefes de gobierno, este instrumento del euro formará parte del presupuesto global de la UE, lo que tiene dos consecuencias inmediatas, que no entrará en vigor como mínimo hasta el 2021 y que limita seriamente su tamaño, porque lo que aquí se destine habrá que retirarlo de otras partes del presupuesto y con la aceptación obligada de los países que no forman parte de la zona euro.
Finalmente, reconociendo el riesgo de que este instrumento presupuestaria se quede corto, se plantean fórmulas para aumentar su dotación, como utilizar la planeada tasa de transacciones financieras, y obligar a los países a cofinanciar partes sustanciales de los proyectos. En diciembre, los jefes de gobierno acordaron las bases para el presupuesto de la eurozona, aunque a costa de diseñar un instrumento de mínimos que París y Berlín quieren reactivar.