El coche reinventado
Seat presenta un prototipo de microvehículo eléctrico pensado para ser compartido en el centro de la ciudad
Los coches serán vetados del centro de las ciudades tarde o temprano. Llegará un momento que dará igual la etiqueta ambiental que tengan. Los patinetes, motos y bicis compartidas se postulan como la gran alternativa para realizar desplazamientos de menos de 10 kilómetros en el espacio restringido y las empresas automovilísticas ya se preparan para ello.
Si en el Smart City Expo World Congress de otoño, Seat presentó un patinete eléctrico, en el Mobile World Congress que abrió sus puertas ayer fueron más lejos, con una apuesta mucho más ambiciosa de vehículo compartido que se inspira en las motos de alquiler que hace años funcionan en Barcelona y los coches que lo hacen en otras ciudades pero en la capital catalana no acaban de arrancar.
Un microvehículo de pequeñas dimensiones diseñado por Seat a medio camino entre una cosa y otra puede revolucionar por completo el sector del vehículo compartido. Y aspira a ir mucho más allá, ya que pretende convertirse en un futuro aún algo lejano en un vehículo sin conductor.
El prototipo, bautizado como Minimó, fue presentado ayer en el Mobile World Congress. Su tama- ño es espectacularmente pequeño (2,5 metros de largo y 1,24 de ancho) pero las posibilidades son muy grandes. Es 100% eléctrico, con una autonomía de 100 kilómetros y unas baterías extraíbles que se pueden recargar en pocos minutos.
Su uso presenta cambios revolucionarios ya que no sólo se desbloquea a través de un teléfono móvil, sino que arrancará a partir de un sistema de reconocimiento facial del conductor, que incluso será capaz de limitar la velocidad máxima de circulación en función de la edad del usuario.
El modelo está pensado para ser adquirido por empresas de vehículo compartido, que reducirían costes a la mitad. “Es la solución que estaban esperando estas empresas”, destaca el presidente de Seat, Luca de Meo, que acelerará el desarrollo del prototipo en función de la acogida que tenga entre estas compañías. Si acaba convirtiéndose en realidad, el beneficio también será para los usuarios. De Meo lo considera una solución para “desplazarse de puerta a puerta por el precio de un billete de bus y con cero impacto ambiental”.
Aunque este proyecto de Seat aún es un prototipo, a escasas calles de donde lo presentaban se hacían las primeras pruebas en un entorno real con un coche con la tecnología 5G en comunicación con los semáforos y otros vehículos para tratar de reducir el riesgo
de accidente. Dentro del salón, los coches conectados se han convertido en una atracción tan interesante como los móviles. Una de las compañías de referencia del sector, Mercedes, muestra estos días en Barcelona su primer vehículo eléctrico, el Mercedes EQC, un SUV muy tecnológico, conectado de forma permanente, que saldrá a la venta a mediados de este año.
El EQC es capaz de buscar por sí mismo el punto de recarga más cercano a lo largo de una ruta. Su autonomía máxima es, según el fabricante, de 450 kilómetros. El modelo de Mercedes lleva una tarjeta SIM interna que le permite conectarse a internet tanto para aspectos relativos a la conducción como de comodidad de los propios pasajeros. El coche puede proyectar una cadena de televisión en la pantalla de la consola central, aunque para evitar distracciones del conductor la imagen desaparece en cuanto empieza a rodar y sólo puede escucharse el sonido.
La música en el modelo de Mercedes puede llegar por muchas vías: desde la radio analógica tradicional (AM/FM), por bluetooth, por un conector USB, mediante radio digital DAB o mediante plataformas de streaming (de momento tiene Tidal). Incluso puede trasladarse una lista de reproducción de un invitado.
Otra compañía alemana, BMW, ha presentado en Barcelona su concepto iNext, un espectacular modelo de SUV eléctrico preparado para la conducción autónoma que podría salir a la venta en una versión comercial a partir del 2021.
La multinacional alemana de software corporativo SAP ha mostrado el Rinspeed Snap, un vehículo autónomo eléctrico, sin conductor ni volante, que está pensado para ser usado como una especie de minibús compartido y que funciona conectado a otros vehículos y a un centro de datos mediante tecnología 5G.
Entre los coches espectaculares del MWC figuran un Audi E-Tron GT y un McLaren 570S equipado con sensores de conducción autónoma.
Los turismos conectados son una atracción tan interesante como los móviles