“Por fin estoy colocado y sin sustancias”
Javier Álvarez, cantautor, presenta su álbum ‘10’ en el festival Guitar BCN
Considerado uno de los grandes renovadores de la canción de autor a finales de los noventa, Javier Álvarez (Madrid, 1969) protagonizó una intensa carrera marcada en sus inicios por el éxito y, siempre, con intención de releer las convenciones del género. Hace diez años firmó Guerrero Álvarez, tras el que entró en un prolongado periodo de silencio que rompió hace unas semanas con la edición de 10 (Music Bus), producido por The New Raemon. Mañana lo presentará en el festival Guitar BCN (Luz de Gas, 21 h) arropado por la batería de Ricky Lavado y el bajo de Meta.
A través de la música de este nuevo álbum, ¿qué imagen se puede formar el oyente?
No lo sé. A día de hoy, este disco al igual que algunas canciones clásicas mías, como Sunset boulevard o
Piel de pantera, no sé de qué van. Además, mi actitud ante la música sigue siendo la misma tanto en los tiempos en que mis canciones eran número uno de Los 40 Principales como ahora: mi actitud, mis anhelos, mi forma de querer expresar y contar no han variado.
Aquel éxito que le acompañó al poco de comenzar su carrera, mirándolo ahora, ¿cree que fue perjudicial para usted?
Fue perjudicial porque a la larga acabé en un hospital psiquiátrico pero fue superbeneficioso porque acabé en un hospital psiquiátrico también. Sobre todo fue maravilloso porque con mi música llegué a muchísima gente, viví unas experiencias inolvidables, y aunque nunca he tenido ese tipo de ambiciones, aquella época me hizo asegurarme que iba a pasar a los anales de la historia del pop español.
¿A qué se ha debido este silencio discográfico de diez años?
Había necesidad de limpiar mucho. Estar conmigo mismo, y sufrir, y disfrutar. Son cosas muy punkies lo que te digo, soy un kamikaze quizás, pero es la verdad. Esta cosas que digo ahora, como por ejemplo que soy historia del pop español, las puedo decir a raíz de ese silencio. Soy un artista que ha sufrido demasiado tiempo y tenía que parar a fin de limpiar todo eso. Ahora estoy en mi sitio. La música sigue siendo mi pasión fundamental, pero ahora la he puesto en su sitio, y ahora puedo decir que yo soy mucho más importante que mi carrera. Soy una persona. Tuve una nube durante bastantes años, desde mi primer disco hasta casi Guerrero Álvarez (de 1995 a 2009); no recuperé la ilusión para cantar hasta que no paré y hasta que no permanecí todo estos años en silencio. Mira, al principio de todo yo cantaba en el parque del Retiro y de repente me descubren, me lanzan y yo comienzo a sufrir. He estado quince años en vida pidiendo perdón cuando salía al escenario y, como decía Jeanne Moreau, cuando sales al escenario lo haces para follártelos, no tienes que pedir perdón como hice yo.
En estos años de silencio, ¿qué ha hecho?
Han sido años de silencio pero no he parado de hacer música. Un disco nunca publicado porque no existe físicamente que se llama A hecho en el 2010 y que son canciones grabadas en casas particulares y antes de este hice dos ep’s , ahora imposibles de encontrar.
En 10 hay un tema muy sintomático, En la cuarta.
Es una canción muy polémica porque hace alusión a la cuarta planta de un hospital psiquiátrico en el que estuve internado por tercera vez; fue en el 2015 y en esa ocasión por una adicción a la cocaína. Fue una de las experiencias más duras de mi vida pero sobre todo mejores porque tuve un aprendizaje mucho más potente que toda mi carrera universitaria. Fue lo que por fin me ha hecho ponerme en mi sitio. Por fin estoy colocado y sin sustancias.
¿Le costó mucho?
Sí, mucho, pero muy alentador desde el primer día. Los médicos flipaban porque desde que dejé las sustancias no tuve, ni tengo, síndrome de abstinencia. Ni de tomar sustancias ni de beber. Ahora veo que las sustancias no me daban nada sino que me quitaban.
En este regreso ha contado con la complicidad de Ramón Rodríguez, The New Raemon, como productor.
Es la gran estrella que tengo ahora conmigo y es muy talentoso. Hicimos el disco entero en diez días y conté con la ayuda inestimable de Ricky Falkner durante un día.
¿Cómo se decide el sonido de este 10? ¿Tenía que sonar diferente
NUEVO PRODUCTOR
“The New Raemon, mi nuevo productor, ha conseguido que yo me suene mejor que nunca”
a lo que había hecho anteriormente para que se notara que lo hacía un nuevo Javier Álvarez?
Yo soy muy yo, y venía de trabajar con mi productor habitual durante mis primeros siete álbumes, es decir, con Suso Sáiz. Ahora, sin compararlos, porque Suso es uno de los mejores productores del mundo, Ramón ha conseguido que yo me suene mejor que nunca, suena más a mí que nunca.
Quería cambiar de aires.
Sí, y es eso lo que le dije a él. El maestro Aute me dijo en una ocasión que mi error era que Suso me había producido demasiado. Y tenía razón. Había que romper. Y Ramón fue como la guinda para que me animara y empezara a componer tras volver a mirar hacia la luz.