“Hay que preservar el espacio público como una patena”

La inseguridad ciudadana vuelve a ser el primer problema de Barcelona. “En términos europeos no tenemos, afortunadamente, un problema de inseguridad muy relevante –apunta Joan Clos–, pero están los pequeños delitos, que molestan mucho a la gente”. “Si ese incremento –añade el exalcalde– se debe a pequeños problemas como el de los manteros, eso es fácil de resolver”. ¿Cómo? “Limitando la ocupación del espacio público de una forma efectiva, con Guardia Urbana pero también con la colaboración de los Mossos en todos los temas de la calle porque no vale diferenciar policías por el color de la gorra”. El alcalde que puso en marcha la ordenanza del civismo observa cierta relajación en lo que se refiere a la ordenación del espacio público. “A la vez que protegemos los derechos de la gente que tiene necesidades –dice Clos– hay actuar, con la misma contundencia, contra los incumplimientos de las normas en el espacio público. De lo contrario se genera un bucle y parece que todo esté tolerado. Hay que preservar los derechos de las personas pero también mantener el espacio público como una patena”. En este sentido, recuerda que hay “métodos más expeditivos que los nuestros y que nadie tilda de antidemocráticos”. Por ejemplo, el de los alcaldes holandeses, “que tienen la capacidad de detener a las personas que ocupan la calle”. “No podemos permitirnos que algo que nos costó muchísimo, como la recuperación de Ciutat Vella, se eche a perder. Por eso –insiste– Barcelona necesita una coalición sólida que pueda sacar adelante transformaciones urbanísticas”.