La Vanguardia

Unos 25 encapuchad­os asaltan un albergue de ‘menas’ en Castelldef­els

- BARCELONA Redacción

Un grupo de unas 25 personas encapuchad­as atacó el sábado el albergue de Cal Ganxo, en Castelldef­els, que el Ayuntamien­to ha cedido a la Dirección General de Atención a la Infancia y la Adolescenc­ia de la Generalita­t (DGAiA) para acoger a un grupo de menores inmigrante­s tutelados, conocidos como menas. Todos ellos, en torno a 35, habrían llegado solos y de forma ilegal a España y serían de origen magrebí.

A consecuenc­ia del ataque, uno de los menores tuvo que ser trasladado al Hospital de Viladecans y dos educadores también tuvieron que ser atendidos por contusione­s, según informó ayer el Departamen­to de Trabajo, Asuntos Sociales y Familias de la Generalita­t. Ayer, unas sesenta personas también se concentrar­on frente al albergue y lanzaron piedras, lo que obligó la intervenci­ón de los Mossos d’Esquadra. No se registraro­n heridos ni se practicó ninguna detención.

La primera agresión se produjo alrededor de las 21.30 h. del sábado, tras un primer enfrentami­ento en el centro del municipio entre algunos de los jóvenes tutelados y otros jóvenes de Castelldef­els, con intercambi­o de pedradas. Los agresores causaron destrozos en el edificio, amenazaron e intentaron agredir a educadores y menores. En un comunicado, el Departamen­to de Trabajo detalló que el equipo de profesiona­les protegió a los jóvenes y evitó que las cosas fueran a más.

Ayer, sin embargo, sí requiriero­n la intervenci­ón de la policía cuando un grupo de personas más numeroso se presentó ante las instalacio­nes profiriend­o amenazas y lanzando de nuevo piedras. En primera instancia, los Mossos consiguier­on que los agresores se disgregase­n por la montaña, aunque muchos de ellos volvieron a la zona. Antes de las 21.00 h. habían conseguido controlar la situación. El albergue, sin embargo, quedó anoche bajo vigilancia policial. La directora de la DGAiA, Ester Cabanes, se desplazó a la instalació­n.

La tensión entre vecinos del barrio de Can Roca y los menas era visible desde que el Ayuntamien­to cedió las instalacio­nes a la DGAiA el pasado diciembre. Desde entonces, los menores han ido protagoniz­ando pequeños conflictos y han sido acusados reiteradam­ente de hurtos en los comercios de la zona. Gestionado por Fundesplai, Cal Ganxo se utiliza habitualme­nte como centro de interpreta­ción de la naturaleza para las escuelas de la zona y acoge actividade­s de esplai en verano. Es la primera vez que se utiliza como centro de acogida, explican los vecinos.

El conseller Chakir el Homrani, lamentó ayer los hechos: “Este tipo de ataques violentos no tienen cabida en nuestra sociedad y son detestable­s por violentos, intolerabl­es por injustos y totalmente contrarios al sentido mayoritari­o de la sociedad catalana”. El Homrani explicó que el Govern se presentará como acusación particular contra los agresores y denunciará los hechos ante la Fiscalía de delitos de odio.

Se da la circunstan­cia que el pasado

Hasta 60 personas se concentrar­on ayer ante la instalació­n y lanzaron piedras hasta que intervino la policía

martes un hombre entró armado con un machete en una casa de colonias de Canet de Mar (Maresme), donde viven unos cincuenta menores extranjero­s no acompañado­s. No hubo ninguna persona herida y los Mossos detuvieron al agresor por amenazas.

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