“Hemos vuelto”
El Bayern espera al Liverpool tras protagonizar una gran remontada en su liga
En Francia utilizan el término remontada en castellano o remuntada en catalán para referirse a una reacción fulgurante en el terreno deportivo. En Alemania no han llegado todavía a este extremo y prefieren emplear el término autóctono para explicar el cambio de tornas en una competición. Por eso estos días en la Bundesliga el vocablo más repetido es aufholjagd, o sea remontada, ponerse al día. Es lo que ha hecho el viejo Bayern, el Bayern de siempre, el clásico, al que ya muchos, empezando por el seleccionador, Joachim Löw, daban por acabado.
A mitad de diciembre el conjunto bávaro andaba muy deprimido y con nueve puntos de desventaja sobre el pujante y juvenil Borussia Dortmund. Pero tres meses más tarde el campeón de las seis últimas ediciones de la Bundesliga ha levantado el vuelo, le ha atrapado en la clasificación y se ha puesto líder por diferencia de goles.
Hacía seis meses que el Bayern no encabezaba su campeonato, un pequeño periodo de tiempo para cualquier otro club pero casi una eternidad para un equipo que se ha paseado en los últimos años por los campos alemanes. “Hemos vuelto. Nos hemos recuperado y ahora no queremos perder esta posición”, afirmó el sábado su entrenador, Niko Kovac, que mantuvo el puesto en un momento complejo y en una entidad que se suele poner nerviosa (véase lo que ocurrió con la destitución de Ancelotti la pasada campaña). Quedan nueva jornadas y se intuye como clave el enfrentamiento que dirimirán en el Allianz Arena el Bayern y el Borussia Dortmund el 6 de abril.
Una vez cumplido el parón invernal se veía venir lo que sucedió el sábado. El Bayern vapuleó al Wolfsburgo (6-0) y el Dortmund, eliminado ya en la Champions, sufrió para batir al Stuttgart por 3-1 con un gol fundamental de Alcácer. Resistió el conjunto de la cuenca del Rühr pero ya ve cómo el Bayern ha tomado el mando.
Todo justo la semana en la que Löw había anunciado que no iba a convocar más para la selección a Müller, Hummels y Boateng. No son tan mayores (29 años el mediapunta y 30 los centrales) pero el técnico de la Mannschaft considera que ya han cumplido una etapa.
La decisión del seleccionador fue un mísil en la línea de flotación de una entidad que si algo tiene es orgullo. No molestó sólo la decisión, sino también el momento. El Bayern emitió una nota lamentando la coyuntura. “Han tenido tres meses para anunciar una cosa así y lo han hecho cuando nos jugamos cosas importantes”, se quejaron el presidente del club, Karl-Heinz Rummenige y el director deportivo, Hasan Salihamidzic. Rummenige añadió que estos futbolistas, espoleados, iban a demostrar a continuación toda su calidad. “Todavía estamos en condiciones de jugar a fútbol al nivel de élite”, le secundó Müller.
Los tres fueron titulares contra el Wolfsburgo y se reivindicaron. Ni siquiera son los más veteranos de un equipo donde Robben (35 años), cómo no, está de nuevo lesionado y donde Ribéry (también 35) todavía protagoniza internadas por la banda.
Aunque pocos jugadores tan en forma como Robert Lewandowski, también en la treintena, para explicar esta racha del Bayern, que suma doce victorias en los últimos trece partidos en el campeonato. El polaco, con 197 tantos en su carrera en el torneo, se ha convertido en el extranjero más realizador de la historia de la Bundesliga, superando al peruano Claudio Pizarro (195). Lewandowski encabeza la clasificación de goleadores de la temporada.
Poco a poco y a la chita callando el Bayern se ha ido recuperando, aunque su gran reválida la tendrá el miércoles frente al Liverpool de Klopp en la Champions. Los bávaros arrancaron un 0-0 en Anfield y buscarán seguir adelante en Europa, terreno que les ha sido esquivo en los últimos años. Pero que nadie les entierre porque en cuestión de amor propio hay pocos equipos como el gigante alemán.