La Vanguardia

La vía del realismo

El equipo de Rubi abraza el pragmatism­o para mantenerse

- ROBERTO RODRÍGUEZ

Empezó tan bonita la temporada que una sensación de desánimo parece haberse instalado en Cornellà. La derrota ante el Sevilla ha supuesto un golpe con el que equipo y afición han visto minados los sueños para esta temporada, que terminará sin los temores del pasado pero también sin grandes alicientes más allá de certificar en las jornadas que quedan una merecida salvación.

Toda esta situación es producto de un comienzo de curso de los más ilusionant­es que se recuerdan. Muchas de las apuestas por parte del club fueron acertadas. No hay duda de eso. Se suplió al delantero estrella con cordura con la llegada de Borja Iglesias y Rubi, nuevo técnico, logró implantar una idea futbolísti­ca atractiva con un éxito enorme. Los resultados también le abrazaron en el inicio y la afición empezó a soñar con una temporada diferente.

Pero esa magia que permitió al equipo optar al liderato de la Liga durante varias jornadas se fue apagando. En ese tránsito intervinie­ron muchos factores que no tienen que ver con la gestión del grupo, como las lesiones sobre todo en puestos clave, o el duro calendario por el buen papel realizado en la Copa del Rey, donde cayeron en cuartos de final frente al Betis.

Mientras se concentrab­an en la competició­n del KO descuidaro­n sus tareas en la Liga. El batacazo fue doloroso y el equipo no fue capaz de levantarse. Quizás cegados por el éxito inicial, Rubi y los suyos no acertaron a cambiar ciertas dinámicas y el equipo perdió la confianza en sus posibilida­des. Las lesiones agravaron el problema defensivo y el grupo se sumió en una depresión durante muchas jornadas. Incapaz de dar con la clave de las malas actuacione­s y agobiado por la dinámica negativa –nueve derrotas en diez partidos amenazaban su puesto–, Rubi modificó parte de su librillo en busca de resultados.

Este pragmatism­o atendía a una lógica de superviven­cia, pero supuso un paso atrás en el modelo prometido. Los blanquiazu­les perdieron parte de la fe que les había hecho superar obstáculos complejos. Ejemplo de ellos es Borja Iglesias, que hace semanas que dejó de ver portería con asiduidad. La productivi­dad ofensiva del delantero es cada día menor. Tres goles en tres meses son su balance desde noviembre.

Los números del equipo tampoco son los esperados a falta de diez jornadas. La temporada pasada, con Sánchez Flores en el banquillo, el equipo sumaba 35 puntos a estas alturas, uno más que ahora. Además, en las últimas nueve temporadas sólo en una, 2015/16 (31 puntos), había sumado menos puntos a estas alturas de la Liga.

El proyecto de Rubi sigue intacto más allá de estas estadístic­as. El técnico ha logrado implicar a nuevos talentos salidos de la cantera y está comprometi­do a llevar a este equipo hacia la madurez. Pero también es el primero en estar decepciona­do y es consciente de que no han estado a la altura de las expectativ­as que ellos mismos habían generado. “Será una cuestión de diferencia de nivel”, dijo tras la derrota frente al Sevilla y amenazando con cambios en la plantilla de la próxima temporada. El objetivo de la salvación está cerca, pero no conseguido. Por ello luchará este Espanyol que prometió fuegos artificial­es pero que ha tenido que abrazar el pragmatism­o para salir del atolladero.

LOS NÚMEROS El equipo suma con Rubi un punto menos que con Sánchez Flores la temporada pasada

 ?? ALBERTO ESTÉVEZ / EFE ?? Borja Iglesias empezó a lo grande pero pasa por un mal momento
ALBERTO ESTÉVEZ / EFE Borja Iglesias empezó a lo grande pero pasa por un mal momento

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain