Deloitte contradice de nuevo a Rato por la auditoría de las cuentas del 2011
El socio auditor de Deloitte Francisco Celma declaró ayer por cuarto día en el juicio de Bankia. Su argumento sigue siendo el mismo: que no elaboró un borrador de las cuentas de Bankia del año 2011, sino que entregó un escrito.
Le han preguntado por dicho informe desde la fiscal, Carmen Luana, hasta las defensas de otros acusados. En la comparecencia de ayer, en la que acumulaba más de 19 horas respondiendo, volvió a echar por tierra el argumento del expresidente Rodrigo Rato y de algún exconsejero: “Ese papel no era ningún borrador”. Es más, detalló que se lo pidió Rodrigo Rato en una conversación telefónica privada, bajo la premisa de que se iban a inyectar 7.000 millones de euros a Bankia. El auditor señaló: “Lo empecé el día 18 de abril por la noche y lo terminé el 19 por la mañana”.
A lo que apostilló: “Le dije a Rato que me tenía que dar algún documento relevante que dijera que ese capital llegaría para yo poder preparar ese papel que me pedía, ya fuera por parte del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) o el Banco de España. Pensé que se materializaría”.
El auditor insistió en que Rato quería tener “ese papel” a toda costa en su poder, aunque aseguró que desconocía las intenciones del expresidente.
El acusado relató que se lo entregó “mediante un mensajero y sin contrastar con el resto del equipo de Deloitte”. Y ante la multitud de preguntas sobre por qué lo hizo, la respuesta siempre fue la misma: “Lo hice por el bien de la entidad y de sus accionistas”.
Previsiblemente hoy empezarán las declaraciones de los testigos. Está previsto que acuda el actual presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri. Le seguirá Miguel Ángel Fernández Órdóñez, gobernador del Banco de España cuando surgió el grupo financiero. Y una de las comparecencias más esperadas es la del exministro Luis de Guindos, que ha solicitado declarar desde Frankfurt.