La Caixa dedicará 4,5 millones para impulsar la inmunoterapia en el Clínic
La alianza incluye además un programa de acompañamiento al final de la vida
La Caixa dedicará 4,5 millones de euros al progreso de la inmunoterapia del hospital Clínic. En un convenio para cuatro años entre ambas entidades centenarias, que casi llega a 6 millones, la mayor parte del dinero servirá “para dar el gran salto”, en palabras de Manel Juan, responsable de la inmunoterapia del hospital. Ese salto permitirá ensayar tratamientos personalizados a partir de células del propio sistema inmunitario modificadas para que sean capaces de actuar contra tumores de mama, de colon o mielomas.
La inmunoterapia del Clínic nació con la aportación de muchos contribuyentes en el proyecto Ari, que tomaba el nombre de una joven que se propuso apoyar esta posibilidad terapéutica que ella no pudo usar. Ese empuje hizo realidad el CART (Chimeric Antigen Receptor-Modified T-Cells), con la modificación de las propias células del paciente para tratar las leucemias agudas linfoblásticas y los linfomas. “Ahora ya hemos atendido 32 casos y el Servei Català de la Salut lo sufraga. Pero esta financiación nos permitirá el ensayo de otro CART para un segmento diferente, el BCMA, que lo tienen las células plasmáticas del mieloma múltiple”, explica Álvaro Urbano, responsable de Hematología y Oncología en el Clínic.
“Pero queremos ir mucho más allá”, asegura Manel Juan. Cita tumores sólidos como el de mama, tratamientos TILS, a partir de linfocitos infiltrados dentro del tumor y reactivados, vacunas de células dendríticas...
La alianza con La Caixa incluye una parte para la formación de “médicos investigadores, una investigación que esté pegada al enfermo”, recalca Isidro Fainé, presidente de la Fundació Bancària La Caixa. Ese apoyo supone ayudar al hospital en el programa Bitrecs, a medias con la Unión Europea, que beca a profesionales del centro para que durante tres años se dediquen más intensamente a la investigación.
El segundo gran paquete de inversión económica se dedicará a implantar en el Clínic un programa que ya desarrolla La Caixa en 42 centros: la atención integral al paciente que tiene una enfermedad avanzada. “Nació pensando en los enfermos que no tenían nadie a su lado, pero ahora también apoya a familiares. Se trata de acompañar emocional y también espiritualmente, sea cual sea su creencia, porque queremos combatir
“Parece que están como sardinas en lata, así que tenemos que ayudar a abrir la lata”, ironizó Isidro Fainé
la soledad, hay una gran necesidad de poder hablar en esas fases”, describió Isidro Fainé.
El Clínic incorpora el programa y lo quiere extender como servicio transversal a todo el centro, no sólo a cuidados paliativos. La inversión de La Caixa permitirá contar con dos psicólogos y un trabajador social para esa tarea para pacientes al final de la vida. También contará –si encuentran sitio– con una sala para que enfermo y familia puedan estar juntos en el final con cierto confort.
Y además, si hay sitio, abrirán un espacio para que pacientes y profesionales puedan debatir sobre necesidades y cambios en el hospital. Forma parte de uno de los programas del plan estratégico del hospital: encontrar canales eficaces de participación de los pacientes.
Después de insistir el prestigio internacional del Clínic, Fainé recordó que “somos coetáneos: La Caixa nació en 1904 y el Clínic en 1906”. Ambas instituciones fruto del impulso de ciudadanos con mucho empuje y con idea de servicio público. “Defendían que lo imposible sólo era algo más difícil que lo difícil. Por eso ahora que, según publicó La Vanguardia, hay aquí un grave problema de espacio, que estáis como sardinas en lata, tenemos que ayudar a abrir la lata”, apuntó el presidente de la Fundació Bancària.