Tensión en Washington
Los motores del buque se estropearon en medio de un gran temporal de viento
La entrega del informe sobre la posible trama rusa en las últimas presidenciales ha provocado una tensión palpable en la capital de EE.UU., que aguarda ansiosa la revelación de lo investigado por el fiscal especial Robert Mueller.
Noruega vivió ayer una de las operaciones de rescate más espectaculares de su historia. Un grupo de al menos cinco helicópteros se turnó para evacuar a los 1.300 pasajeros que viajaban en el crucero Viking Sky. Todo iba bien hasta que la tripulación descubrió un problema en los motores cuando la embarcación navegaba a la altura de la costa de Hustadvika, en el oeste del país. No es precisamente la mejor zona para que un barco pierda el control. Es un tramo de costa de unos 19 kilómetros de largo, poco profunda y con pequeñas islas y arrecifes, que se vio azotada ayer por fuertes vientos.
Los equipos de rescate lograron poner a salvo en las primeras horas a unos cien cruceristas, lo que ilustró desde el principio que completar la operación sería una tarea muy ardua y compleja: cada helicóptero –y no puede haber más por razones de seguridad– transporta entre diez y quince personas en cada trayecto. Los pasajeros son izados uno a uno desde la cubierta a la aeronave mediante un cable.
“No había visto jamás nada tan terrorífico. Comencé a rezar, recé por la seguridad de todo el mundo a bordo”, explicó a la televisión pública, NRK, Janet Jacob, una pasajera que acababa de ser llevada a tierra firme. “El viaje en helicóptero fue horroroso. El viento parecía un tornado”, dijo.
Además de los cinco helicópteros, que se tenían que ir turnando para no entorpecerse en las idas y venidas, se enviaron equipos de rescate en botes. A estas embarcaciones ligeras se sumó más tarde un número indeterminado de barcos, que fueron movilizados y se mantenían a la expectativa por si su concurso era necesario.
El crucero pertenece a la empresa Viking Ocean Cruises. La embarcación siniestrada entró en servicio en el 2017 y había pasado todos los controles de seguridad. El lugar donde se lanzó la llamada de socorro se considera una de las zonas más peligrosas de Noruega, escenario de numerosos naufragios.
“El crucero ha enviado una señal de socorro, a raíz de problemas de propulsión agravados por el mal tiempo. Ha puesto rumbo a tierra, pero hemos enviado helicópteros y barcos para iniciar el rescate”, informaron inicialmente los servicios de emergencia del condado de Møre y Romsdal. Las autoridades han establecido un centro de acogida en un pabellón deportivo cerca de la costa. Allí llegaron los primeros rescatados, algunos con ataques de ansiedad porque aún tenían amigos o familiares a bordo. Las maniobras de los helicópteros fueron muy complicadas, ya que el crucero se veía azotado por el intenso oleaje en una zona especialmente compleja para la navegación, con fuertes corrientes marinas.
“Nunca había visto nada tan terrorífico”, explicó una pasajera que acababa de ser llevada a tierra firme