Las tecnológicas animan la bolsa
MIENTRAS la Bolsa de Wall Street vive momentos de gran dinamismo con importantes compañías que salen o van a salir al mercado, fundamentalmente del sector tecnológico, las bolsas europeas languidecen lastradas por la debilidad y las incertidumbres que aquejan a sus respectivas economías.
Tras un primer trimestre de parón en las salidas a bolsa de compañías en busca de financiación, esta semana ha sido la red social Pinterest, el popular tablón de anuncios de internet, quien se ha estrenado en el mercado estadounidense al poner en venta acciones por un valor global de 1.425 millones de dólares. Al precio de diecinueve dólares la acción, si se consolida en el mercado, el valor total de esta compañía será superior a los 10.000 millones de dólares.
Como sucede en la mayoría de las compañías tecnológicas, Pinterest ha salido al mercado en busca de financiación sin haber obtenido todavía beneficios, algo que es impensable que suceda en los mercados europeos. Los inversores estadounidenses no ven todavía riesgo de burbuja bursátil y apuestan por las expectativas de crecimiento de esta compañía, sobre todo porque Pinterest, con sede en San Francisco, dobló su facturación en el 2018. Alcanzó los 755 millones de dólares de ingresos, y llegó hasta los 265 millones de usuarios activos en todo el mundo, lo que supone dos veces más que el año anterior.
Pinterest ha sido el segundo unicornio, nombre con el que se conoce a las empresas no cotizadas que se valoran en más de 1.000 millones de dólares, que ha salido al mercado este año. El anterior ha sido la empresa de transporte bajo demanda Lyft, principal competidora de Uber, y se espera que esta última también salga al mercado
este mismo año. Ello supondría la mayor operación pública de venta de acciones de los últimos años, ya que su valoración se estima en cerca de 100.000 millones de dólares. También hay expectación ante una futura salida al mercado de la plataforma turística Airbnb, con lo que el sector tecnológico estadounidense se mantiene como activo motor del mercado.
El dinamismo de Wall Street contrasta con la languidez de las bolsas europeas, donde las incertidumbres derivadas de las tensiones comerciales globales, de la evolución del Brexit, de la excesiva volatilidad y de la situación política de algunos países frenaron especialmente la salida al mercado de nuevas empresas. El importe de las salidas a bolsa en el primer trimestre, en este sentido, ha sido un 98% inferior al conseguido en los mismos meses del año pasado. Las veintitrés salidas a bolsa registradas entre enero y marzo en Europa, por un valor de 351 millones de euros, supusieron una actividad casi testimonial si se compara con las 47 realizadas en el mismo periodo del 2018 por valor de casi 15.000 millones. Según los expertos, en los mercados europeos, incluido el español, hay un grupo destacado de empresas de pequeña y mediana capitalización que están a la espera del momento adecuado para salir a bolsa, a medida que las incertidumbres políticas y económicas se desvanezcan. En cualquier caso, las bolsas europeas juegan en una segunda división ante el enorme dinamismo y dimensión de la bolsa estadounidense.
Para la Unión Europea es importante que aumente el número y el volumen de empresas que cotizan en bolsa con objeto de que el tejido empresarial se refuerce financieramente y el ahorro pueda participar de sus beneficios en mayor proporción de lo que lo hace actualmente.