La Vanguardia

El mundial en sus manos

- TONI LÓPEZ JORDÀ

Lejos de acomodarse en el conservadu­rismo, Marc Márquez quiere utilizar sus 93 puntos de ventaja en el mundial para levantar el título cuanto antes, por lo que enfrenta el Gran Premio de Aragón con el objetivo de subir por cuarto año seguido a lo más alto del podio, sin importar la previsión de lluvia en el día de la carrera.

Desde una atalaya de 93 puntos de ventaja se observa el mundo de otra manera, con tranquilid­ad y confianza. Nunca nadie en la cilindrada reina había disfrutado de un margen tan grande, consumidas 13 carreras, desde Valentino Rossi en el 2005 sobre Max Biaggi (122 puntos). Así que con este cojín, Marc Márquez se puede permitir prescindir de conservadu­rismo y arriesgar por ganar. Su objetivo, según dijo en la previa del GP de Aragón, es “lograr el título cuando antes”. Lo tiene a tiro de piedra.

Ni una probable jornada de lluvia el domingo en Alcañiz, como apuntan las previsione­s –sería la primera carrera del año pasada por agua–, afecta el planteamie­nto ganador de Márquez. “Las previsione­s de lluvia no harán modificar mi modo de afrontar la carrera de una manera más conservado­ra. El primer objetivo es acabarla, pero al final sé que tengo una gran ventaja. Así que pienso trabajar de la misma manera, intentando estar en el podio el domingo, sin importar en qué condicione­s sea”, señaló Marc, que presumía de “no haber sido nunca conservado­r; siempre lo intento, y aquí lo volveré a intentar. La mentalidad conservado­ra nunca ha ido conmigo, si no es que es la última carrera del año…”

El Mundial, su 6.º título de Motogp y 8.º en total, lo tiene tan a tiro que de Alcañiz podría salir con el primer match ball para la próxima carrera de Tailandia, a falta de cinco GP. Con 93 puntos de renta tiene suficiente con acabar en el top 9 (aunque ganase Dovizioso) para disponer en Buriram del primer cartucho para conquistar el título. Dicho de otro modo: muy mal se le tendría que dar en Alcañiz, donde ha ganado los últimos tres años seguidos, para no poder ser campeón en la próxima carrera. “Es cierto, y soy honesto, que este campeonato sólo lo puedo perder yo, y si lo perdiese me tiraría de los pelos unos cuantos años”, comentaba el de Cervera, que no oculta su intención de intentar “ganar el campeonato lo antes posible”. “Pero sin prisa –precisa–. Tuve prisa en el 2014, y me caí en dos carreras consecutiv­as, en Misano y Aragón. Mi

SIN CONSERVADU­RISMO “Intentaré estar en el podio, sin importar si llueve; la mentalidad conservado­ra nunca fue conmigo”

‘MATCH-BALL’ A LA VISTA “Este Mundial sólo lo puedo perder yo, y si lo perdiese me tiraría de los pelos unos cuantos años”

objetivo de aquí a final de año es intentar acabar todas las carreras en el podio y disfrutar, y veremos si puedo logar el título cuanto antes”.

A priori, Márquez, ganador en la última carrera de Misano y con Motorland entre sus circuitos-jardín preferidos, es el favorito a la victoria. Y poco parece que Andrea Dovizioso pueda inquietarl­e, en una pista arisca para él (caídas en el 2010, 2011 y 2014). Así que Marc ve más peligrosas a las Yamaha, sobre todo a Quartararo, con quien se jugó el último triunfo, sin descartar a Viñales y también a la Suzuki de Rins, que corre en su segunda casa.

Para Dovizioso, que lleva camino de un tercer subcampeon­ato consecutiv­o, a la sombra de Márquez, el objetivo ya no es tanto buscar un milagro forzando al 93, como amarrar la plata del Mundial. “Necesito luchar por el segundo puesto del campeonato, es muy importante, las Yamaha y Rins están especialme­nte fuertes, y debo ir con cuidado para no perder la plaza”, decía el italiano de Ducati, más pendiente del retrovisor, con Petrucci a 31 puntos y Rins a 33.

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