Álvarez de Toledo volverá a ser la candidata popular por Barcelona
En las pasadas elecciones generales, el líder del PP, Pablo Casado, ofreció a Cayetana Álvarez de Toledo la posibilidad de ser la número dos en la lista de Madrid, asegurándole tanto el escaño como gran visibilidad mediática. Álvarez de Toledo declinó el ofrecimiento y optó por encabezar la lista por Barcelona, una de las plazas más incómodas para los populares, y enfrentarse “en el terreno de las ideas” con el independentismo. El inesperado fichaje del PP catalán, al que contribuyó la buena sintonía que tiene con el líder del PPC, Alejandro Fernández, tendrá continuidad en los próximos comicios del 10-N.
A falta de que la dirección del PP valide oficialmente las listas, Álvarez de Toledo, partidaria de que las fuerzas constitucionalistas sumen bajo un mismo paraguas, ya ha decidido volver a ser la candidata de los populares en Catalunya. Un compromiso personal y político para intentar desquitarse del mal resultado cosechado el 28-A –un único escaño–, pero también para ahondar en la elaboración del “libro blanco del constitucionalismo”, proyecto que pretende abrir un debate entre las formaciones y entidades constitucionalistas en Catalunya con el fin de aunar esfuerzos.
Los conservadores catalanes apostarán así por la continuidad en la mayoría de puestos. La previsión más moderada es la de conseguir dos escaños en la provincia de Barcelona y uno en Tarragona.
Sus competidores en el espacio del centroderecha constitucionalista, Ciudadanos, tiene en la candidatura por Barcelona, que el 28 de abril lideró Inés Arrimadas, una incógnita por despejar en los próximos días. Nadie da por hecho que la portavoz del grupo parlamentario naranja en el Congreso, que decidió abandonar el Parlament y centrarse en la política española, asuma de nuevo esta responsabilidad.
La presencia de Arrimadas en la lista de Barcelona sería la decisión más lógica, por su gran popularidad entre la militancia en un momento en el que Cs sufre en los sondeos al ser sus antiguos votantes los que más dudan con vistas al 10-N.
Varias fuentes naranjas aseguran que la dirigente en estos momentos está dudando –si Cs se da un batacazo en Catalunya, Arrimadas, que es vista como la sustituta natural de Rivera, sería señalada como máxima responsable– y no descartaría integrarse en la lista por Madrid detrás del líder de Cs. La posición del partido, hoy por hoy, es que “es poco probable que haya grandes cambios” respecto a la configuración del 28-A.
En el PSC creen que lo más probables es que la actual presidenta del Congreso, Meritxell Batet, uno de sus grandes activos, repetirá como cabeza de cartel en Barcelona.
Arrimadas duda si concurrir por Madrid, y en el PSC dan casi por hecho que Batet liderará su candidatura