Leonor elogia a quienes piensan y actúan para que el mundo sea mejor
La princesa inicia, “con emoción”, su camino como heredera al trono
Con voz pausada, semblante sonriente, muy consciente de su papel y vestida de azul, la princesa Leonor pronunció ayer su primer discurso público, en el mismo lugar en el que lo hizo su padre, el rey Felipe, hace 38 años. La ceremonia de entrega de los premios Princesa de Asturias ha sido elegida para la entrada de la heredera en la vida oficial con unas palabras en las que, además de reiterar su compromiso “con la entrega y el esfuerzo de servir a España”, hizo suyos los valores que encarnan los premiados, cuyas obras, ha dicho, “nos recuerdan que hay millones de personas que piensan y actúan para que el mundo sea mejor”.
Leonor dio las gracias a quienes, hace 40 años, crearon la Fundación que se llamó Príncipe de Asturias hasta la proclamación del Rey en el 2014 y, sobre todo, agradeció su trabajo a los premiados a lo largo de los años y concretamente a los protagonistas de la ceremonia de este viernes, por “fomentar la cultura y la ciencia, por impulsar la solidaridad, por mejorar la educación, por trabajar para preservar la naturaleza y reducir las injusticias, la discriminación, la pobreza y la enfermedad.”
La princesa de Asturias, que el próximo 31 de enero cumplirá 14 años, se ganó al público presente en el teatro Campoamor cuando tras explicar que sus padres siempre les han explicado, a ella y a su hermana, la cultura, la historia y las tradiciones de Asturias, dijo “yo llevo sangre asturiana”, tras recordar que aquella era la tierra de la reina Letizia. Además de referirse a su madre, la princesa se dirigió a su abuela, la reina Sofía, quien, como cada año, y esta vez, más emocionada que nunca, seguía la ceremonia desde uno de los palcos del teatro Campoamor. “Me gustaría dar las gracias a mi abuela, la reina Sofía. Ella sabe lo importante que es para mí su presencia en esta ceremonia”, dijo Leonor a quien también observaban, desde la platea, su abuela materna, Paloma Rocasolano, que no pudo contener el llanto, así como su abuelo Jesús Ortiz, junto a su esposa, Ana Togores; su bisabuela Menchu Álvarez del Valle y su tía Telma Ortiz, junto a su pareja, Robert Gavin.
Pero, por encima de todas las referencias familiares, la dedicada a su padre, el Rey, tuvo además del componente sentimental, el institucional. Leonor dijo sentirse muy feliz por estar viviendo un “día muy importante en mi vida que he esperado con mucha ilusión” y cerró sus palabras haciendo suyas las que pronunció su padre en el mismo lugar hace 38 años: “Llevaré siempre este día en lo más profundo de mi corazón”.